El Centro de Monitoreo de cámaras de seguridad instaladas en el transporte público del Estado de México (Edomex) ha fracasado en su objetivo debido a la falta de pago del servicio de internet por parte de los conductores. Lo anterior a llevado a una revisión del programa para buscar otras alternativas. Según el secretario de Movilidad, Daniel Sibaja González, la mayoría de los operadores de vehículos que cuentan con este sistema de vigilancia no han cubierto el costo mensual de este servicio, pieza clave para el funcionamiento del kit de seguridad.
Este programa tenía como fin colocar cámaras de vigilancia en autobuses, camionetas y taxis que transitan por el Estado de México, con el objetivo de aumentar la seguridad de los pasajeros. Sin embargo, el elevado costo de adquisición del equipo, sumado al pago recurrente del servicio de internet, ha resultado poco sostenible para los transportistas. Además, se mencionó el uso inadecuado de estas grabaciones por parte de algunas rutas, que llegaron a extorsionar a autoridades locales con el material captado, bajo la amenaza de publicarlo si no se les brindaba un beneficio económico.
Los objetivos del Centro de Monitoreo
El Centro de Monitoreo localizado en Tlalnepantla dispone de avanzada tecnología pero se encuentra a su mínimo potencial debido a la falta de conexión con los dispositivos ubicados en los vehículos de transporte. Aproximadamente 100 mil cámaras fueron instaladas en base a la obligación de cumplir con este requisito para la regularización de los servicios, de un total de casi 150 mil concesiones. La posibilidad de extender el plazo para la regularización de estos servicios hasta enero es una medida en consideración, con el fin de aumentar la cobertura de este sistema de seguridad.
La importancia de regularizar los servicios de transporte público en el Estado de México se ve reflejada en la estrecha relación entre la implementación de sistemas de seguridad y el control de la operativa de los vehículos. De los aproximadamente 700 mil vehículos de transporte público que circulan en la región, solo una cuarta parte cuenta con los permisos necesarios.