Esta es la única estación del Metro de la CDMX nombrada en honor a una mujer mexicana

El Metro de la Ciudad de México es el transporte más importante para los ciudadanos, pues resulta como uno de los medios más eficaces para trasladarse por la capital del país. De acuerdo con estimaciones del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), diariamente el Metro transporta alrededor de 3.1 millones de usuarios. Según las cifras de la Estadística de Transporte Urbano de Pasajeros (ETUP), el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro llevó a 90 millones 620 mil 349 de personas durante el mes de diciembre de 2023.

La coloquialmente llamada “limusina naranja”, que tiene más de 53 años de servicio, tiene en total 195 estaciones distribuidas en sus 12 líneas, cada una con un nombre e iconografía distintiva. Sin embargo, del total de paradas que hace el Metro, solo dos llevan el nombre de mujeres históricas. La más famosa de éstas es Isabel la Católica, que pertenece a la Línea 1 (que va de Pantitlán a Observatorio), pero este personaje pertenece es una mujer española (quien apoyó la expedición de Cristóbal Colón a América).

La única mujer mexicana que tiene una estación del Metro con su nombre es Eugenia Ojeda de Castelló, con la estación Eugenia. ¿Quién fue esta mujer y por qué el Metro lleva su nombre?

Con una ilustración minimalista en blanco de la cigüeña sobre un color verde olivo, la estación Eugenia pertenece a la Línea 3 del Metro (que va de Indios Verdes a Universidad). Se encuentra en la alcaldía Benito Juárez y fue inaugurada en 1980, como parte del quinto tramo de la línea a la que corresponde.

La estación no cuenta con correspondencia o conexión con ninguna otra línea de Metro, por lo que solo es considerada como una estación de paso. Tiene dos accesos ubicados sobre la Avenida Cuauhtémoc, uno en la colonia Vertiz Narvarte y otro sobre la colonia Del Valle.

Desde el inicio del proyecto del Metro, en 1967, se pensó con el objetivo ser un proyecto único con “infraestructura minuciosamente planeada para dar un servicio de calidad”, por lo cual se pensó con una guía de señalización clara y objetiva para que los usuarios se desplazaran sin problemas en todas las líneas.

De acuerdo con el STC, para la señalización al interior de las instalaciones del Metro y de los vagones, se recurrió a arquitectos, fotógrafos y diseñadores, tanto nacionales como internacionales, entre los que destacó Lance Wyman como director de diseño y dos mexicanos, Arturo Quiñónez y Francisco Gallardo. Entre ellos se pensó la iconografía como un recurso visual que podría ayudar sobre todo a quienes no supieran leer (por el nivel de analfabetismo de la década de 1960) así como a los turistas extranjeros.

El nombre e icono de las estaciones se determinó a partir de su geolocalización, por lo que el Metro Eugenia recibió su nombre al ubicarse en la avenida del mismo nombre, también conocida como Eje 5 Sur. El origen de la avenida tiene una historia, de hecho romántica, detrás.

Eugenia Ojeda de Castelló era una mujer distinguida por su labor caritativa y de apoyo constante a la comunidad. Fue esposa del por ser una persona caritativa y que constantemente obraba en buen de su comunidad. Fue esposa de José Castello, quien fungió como director del Banco de México y que contaba con una propiedad llamada Quinta Eugenia.

En la Quinta, la mujer realizaba acciones de caridad hacia los colonos del lugar. Su residencia se ubicaba en el cruce de la Avenida Coyoacán y la avenida que en 1924 adquirió el nombre de Eugenia, debido al gran amor que le tenía José Castelló a su esposa.

El nombre Eugenia proviene de las voces griegas EU (bien) y GENIA (origen), por lo que su significado es “la bien nacida”. Como una forma de ilustrar el nombre, el icono que se le designó a la estación se colocó a la cigüeña, en referencia a la mitología popular que asocia los nacimientos con dicha ave.

De las 195 estaciones del Metro, hay algunas otras que llevan nombres femeninos, sin embargo éstos no corresponden a personajes de la historia. Algunos de ellos son Santa Anita, La Merced y Santa Marta, de las líneas 4, 1 y A, respectivamente, no corresponden a personajes históricos, sino al nombre del barrio donde se ubican. En los tres casos, los lugares fueron nombrados por una figura católica.

Pese a que México cuenta con muchas mujeres que formaron parte de la historia, son pocos los lugares importantes llevan nombres de mujeres.