La traición de un integrante del Cártel del Golfo que desató el horror en Tamaulipas

Los enfrentamientos y bloqueos en varios municpios de la entidad tienen un origen el cual es “un pecado mortal” en el crimen organizado

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Una traición provocó la ola de violencia en la entidad. Imagen: Infobae México
Una traición provocó la ola de violencia en la entidad. Imagen: Infobae México

Una traición sería la razón por la cual en los últimos días el estado de Tamaulipas ha sufrido jornadas violentas de balaceras, bloqueos y diferentes enfrentamientos entre facciones del Cártel del Golfo (CDG), mismas que mantienen en vilo a los habitantes de las ciudades fronterizas.

De acuerdo con las autoridades de seguridad de Tamaulipas, los enfrentamientos en días pasados reportados en los municipios de San Fernando, Jiménez, Matamoros y Reynosa, se desataron por el conflicto de dos facciones del CDG: Los Panteras y El Grupo Escorpión.

“Los que eran amigos hoy son enemigos, los desplazados buscan regresar a controlar su territorio”, dijo Sergio Hernando Chávez García, secretario de Seguridad de Seguridad Pública (SSP) de Tamaulipas.

La tensión del conflicto comenzó en los primeros minutos del viernes, 28 de abril, cuando se reportó un enfrentamiento del CDG con supuestos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), lo que suponía que la organización de Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, intentaba ingresar al estado.

Cerca de la estación de policía fueron abandonadas camionetas con siglas del CJNG. Foto: TW/@FuriaNegra77
Cerca de la estación de policía fueron abandonadas camionetas con siglas del CJNG. Foto: TW/@FuriaNegra77

Sin embargo, con el paso de la jornada violenta, en redes sociales comenzaron a circular diferentes audios que daban cuenta de que en los enfretamientos participaron integrantes de Los Zetas Vieja Escuela y de otra facción del CDG, quienes supuestamente fueron financiados por el CJNG para ingresar al territorio de la facción del Grupo Escorpión.

“No por algo les queda el Cártel del Golfo, por golfxs”, se escucha decir a un presunto sicario de Los Zetas, quien dice varios insultos por la radiofrecuencia a integrantes del Grupo Escorpión: “Golfos ustedes que le dieron la nalgxs al Cártel de Jalisco, pinchxes mugrosos no pudieron solos”, respondieron.

De acuerdo con reportes de las autoridades de los Estados Unidos, el Cártel del Golfo se ha dividio en varias facciones competidoras entre sí y algunos anailistas ya no lo consideran como una estructura criminal homogénea.

Según el periodista en temas de seguridad, Óscar Balderas, el enfrentamiento de las facciones del CDG se debe a una traición de Carlos Roel, alias El Chuy 7, identificado como líder del CDG en San Fernando desde el 2019, y cual había logrado tejer una alianza con Los Metros. Sin embargo, detalló el periodista, se cambió de bando con el CJNG.

Las camionetas fueron remolcadas por las autoridades. Foto: TW/@FuriaNegra77
Las camionetas fueron remolcadas por las autoridades. Foto: TW/@FuriaNegra77

“La invasión en Tamaulipas de este fin de semana de cientos de pistoleros armados hasta los dientes, comenzó con la busqueda de un hombre, un tal Carlos Roel, conocido por su apodo El Chuy 7. Este sábado y domingo, la escisión más poderosa del Cártel del Golfo, los temidos Escorpiones, salieron de su bastión en Matamoros. Atravesaron el estado con rumbo al sur y llegarona San Fernando”, informó el periodista en su capsula radiofónica Nacional Criminal.

El periodista detalló que el Grupo Escorpión tenía la ubicación exacta de El Chuy 7, “aquel capo se había convertido en el enemigo a muerte del CDG, porque según Los Escorpiones cometió un pecado mortal en el crimen organizado: había cambiado de bando uniéndose al CJNG”.

De acuerdo con el periodista, El Chuy 7 fue acusado por sus excompañeros de operar para que el CJNG entrara por la frontera sur del estado, donde Los Zetas Vieja Escuela, quienes fueron el brazo armado del CDG, todavía tienen un bastión en Túxpam y Tampico.

Balderas señaló que semanas previas al estallido del conflicto de las facciones, vecinos de la región de la Huasteca Potosina alertaron sobre una fuerte presencia de más convoys de vehículos artillados y sin placas fuera de lo usual.

“La cacería del Chuy 7 no tuvo éxito pero desató una serie de eventos desafortunados que permitieron que el terror se apoderara de Tamaulipas durante el fin de semana, generando balaceras de hasta diez horas consecutivas”, mencionó el periodista especializado.