A dos años de que AMLO dijo que ya no hay torturas ni desapariciones en México, ¿las hay?

Fue su Segundo Informe de Gobierno, habló sobre cómo su gobierno estableció una nueva estrategia para recobrar la seguridad cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó la afirmación de que en México “ya no hay torturas, desapariciones ni masacres, se respetan los derechos humanos y se castiga a los culpables, sea quien sea”.

Esta es una de las 34 declaraciones del presidente López Obrador que la organización Artículo 19 contrastó con información pública de la Presidencia, como parte de su informe (Des)Información Oficial y Comunicación Social, de la cual se desprendió que de ese total de dichos revisados sólo dos están sustentados.

La afirmación que el presidente realizó aquel 1 de septiembre de 2020 fue polémica, y de acuerdo con Artículo 19, se trata de una declaración falsa, esto es, que la información pública recibida por la organización presenta datos que contradicen lo establecido por el mandatario.

En su análisis de la declaración, Artículo 19 precisó que solicitó información a la Presidencia para conocer el número de casos de tortura, desaparición y masacres registradas en México en los años 2018, 2019 y 2020, pero para ello se consideró que el término “masacre” no es considerado un delito tipificado en el Código Penal Federal.

Sobre las desapariciones, la Presidencia vinculó al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) y se consultó al Registro Nacional de Personas Desaparecidas o No Localizadas (RNPDNO), lo que arrojó que del 1 de diciembre de 2018 al 1 de septiembre de 2020, cuando se realizó la declaración, se registraron 14 mil 907 casos de personas desaparecidas.

Mientras que en cuanto a desapariciones y “masacres”, se solicitó información a la Fiscalía General de la República, que en atención a un ordenamiento del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) entregó datos de la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos, en la cuál se presentaron averiguaciones previas y carpetas de investigación que se abrieron entre 2018 y 2021.

De esta forma, entre 2018, 2019 y 2020, se realizaron 16 averiguaciones previas por delitos como tortura, así como carpetas de investigación por este delito, de las cuales mil 445 corresponden a 2018; 2 mil 274 a 2019 y mil 276 a 2020.

Mientras que algunos órganos como la Policía Federal Ministerial y la Dirección General de la Unidad para el Combate al Secuestro dieron cuenta a la organización de dos casos de tortura en 2020 y seis de desaparición, tres en 2019 y tres más en 2020.

La FGR sumó también a su respuesta a Artículo 19 información sobre el Registro Nacional del Delito de Tortura, en donde se colocaron expedientes de los tres años en cuestión: 2 mil 511 de 2018, 3 mil 351 de 2019 y 2 mil 231 de 2020.

Basado en estos datos, Artículo 19 determinó que las declaraciones realizadas por el presidente López Obrador no eran consistentes con los datos públicos que las distintas dependencias brindaron, esto en lo referente a las torturas y desapariciones; mientras que en el caso de las masacres, cuyo término se introdujo a fin de que las dependencias lo interpretaran, no se obtuvo información.

Sin embargo, las declaraciones del presidente sobre las masacres se dio a casi un año del asesinato de nueve integrantes de la familia LeBarón en Bavispe, Sonora, ocurrida en noviembre de 2019, cuando Alfonso Durazo era secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, cargo que abandonó para convertirse en gobernador de esa misma entidad.

Este es uno de los casos más relevantes del sexenio hasta ahora y por el cual, calificada por la misma familia LeBarón como una masacre, motivo por el que respaldó desde hace varios meses la propuesta estadounidense de declarar a los cárteles de la droga como terroristas.