Tras el golpe que resultó la pandemia para sus producciones, Harrison Ford y Tom Cruise regresaron a las salas con sus sagas cinematográficas más representativas: Indiana Jones y Misión Imposible. Las nuevas entregas de ambas franquicias demostraron que los actores están dispuestos a darlo todo para mantenerse a la altura de los tiempos a pesar de los años. Pero, en lo que respecta al éxito económico, las películas no dejan de ser un dolor de cabeza para sus estudios.
De acuerdo a un reciente informe de Variety, tanto Indiana Jones y el Dial del Destino como Misión Imposible: Sentencia Mortal van camino a perder 100 millones de dólares cada una. Aun así, esto no significa que las películas de Ford y Cruise no hayan llevado público a las salas. La primera recaudó 375 millones de dólares, mientras que la séptima entrega de Misión Imposible superó los 523 millones de dólares.
Los números revelados indican que ambas cintas recaudaron más de lo que costó producirlas, pero no lo suficiente para cubrir sus gastos de marketing. Se estima que, además de tratarse de producciones de alto perfil, tanto Indiana Jones como Misión Imposible invirtieron unos 100 millones en marketing, lo que las convierte en las películas más caras de sus respectivos estudios y su mayor problema hasta el momento.
Cabe mencionar que no todo está perdido ya que las producciones de Harrison Ford y Tom Cruise todavía tienen una ventana más de recaudación con la distribución digital y la llegada al streaming, pero se trata de una jugada a largo plazo para Disney y Paramount Pictures.
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