Sánchez y Montenegro sellan su alianza pese a pertenecer a familias políticas distintas

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Madrid, 15 abr (EFE).- El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro portugués, Luís Montenegro, sellaron este lunes en Madrid su alianza para mantener la buena relación bilateral y defender intereses comunes en el exterior pese a pertenecer a familias políticas distintas.

Sánchez y Montenegro mantuvieron una reunión en el Palacio de la Moncloa con motivo de la visita del jefe del Gobierno portugués, su primer viaje al extranjero desde que asumió el cargo en sustitución del socialista António Costa.

Pero el hecho de que Montenegro pertenezca a otra familia política (lidera el conservador Partido Social Demócrata luso) no va a afectar a la buena relación bilateral existente, según garantizaron ambos líderes.

"Portugal seguirá siendo un socio, un compañero de viaje", dijo Montenegro en una rueda de prensa posterior, quien apeló a ser capaces de mantener viva "esta llama de vinculación -añadió- entre nuestros países, nuestros pueblos, nuestros gobiernos".

En esa línea insistió en que "no hay diferencias que puedan poner en tela de juicio ni por un momento ni por un segundo la relación que llevamos labrando desde hace siglos al servicio de las personas".

"Somos historia, somos presente y, sobre todo, tenemos un futuro compartido en un mundo muy complejo", manifestó por su parte Sánchez.

En la reunión hablaron de la próxima cumbre entre España y Portugal, que este año corresponde organizar a los lusos y que se acordó celebrar la segunda quincena de octubre pero aún sin lugar ni fecha fijada.

Ambos líderes abordaron también asuntos como los fondos europeos, las interconexiones energéticas y de transporte, y diversas cuestiones de política internacional como la guerra en Ucrania y el conflicto en Oriente Próximo.

Preguntados sobre cómo hacer frente a la ultraderecha en las próximas elecciones europeas, Montenegro, quien fue elegido primer ministro con un margen muy estrecho después de negarse a pactar con la formación ultraderechista portuguesa Chega, consideró que el combate a esos partidos pasa por gobernar bien y hacer políticas que resuelvan los problemas de los ciudadanos.

Si eso ocurre cree que el problema se resolverá por sí solo, pero si no se logra se puede dar una oportunidad para que el sentimiento de frustración, desapego e indignación pueda canalizarse y llegar a partidos más extremistas, ya sean de izquierdas o de derechas.

Por su parte, Sánchez dijo que cada país tiene su propio ecosistema político y los partidos toman sus decisiones.

A su juicio, el fenómeno de la ultraderecha se debe a que hay una corriente global, una "internacional ultraderechista que quiere socavar y debilitar los cimientos de la convivencia y la democracia con desinformación": "y ahí cada cual tiene que decidir qué papel jugar".

Sobre la posibilidad de que el ex primer ministro portugués António Costa pueda ser el próximo presidente del Consejo Europeo, Sánchez destacó su labor pero dijo que aún es pronto para hablar de eso aunque está convencido de que tiene todas las cualidades para aspirar al puesto.

Montenegro bromeó diciendo que no es tan "fan" de Costa como Sánchez pero que eso no impide que tengan propuestas y objetivos comunes. EFE

BB/jdm/msh/vh

(foto)(vídeo)

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