La resaca es una de las consecuencias más habituales del consumo de alcohol. Dolor de cabeza, náuseas, fatiga extrema y sensibilidad a la luz forman parte de los síntomas que experimentan las personas tras una noche de copas o fiesta. Aunque no existe una solución definitiva para evitarla por completo, sí hay estrategias que pueden ayudar a reducir sus efectos. Una de ellas tiene que ver con lo que se come antes de beber.
Según explica Carolina, una bióloga conocida en redes como @unacordobessa, hay un alimento concreto que puede marcar la diferencia si se consume antes de ingerir alcohol. En uno de sus vídeos más recientes de TikTok lo comunica. Se trata del queso curado, un producto rico en grasas que influye directamente en la forma en que el cuerpo procesa las bebidas alcohólicas.
Para entender el motivo, la especialista explicó primero qué ocurre en el organismo cuando se consume alcohol. “Cuando tomas alcohol, este rápidamente se transforma en acetaldehído y luego en acetato”, señaló. El problema aparece cuando ese proceso no se da de forma equilibrada y el acetato comienza a acumularse en el cuerpo.
La química del organismo
Esa acumulación es la responsable de los síntomas clásicos de la resaca. Entre ellos, el dolor de cabeza, las náuseas, el cansancio intenso y la molestia ante la luz. La clave, según la bióloga, está en darle tiempo al organismo para completar correctamente ese proceso metabólico.
En este contexto entra en juego la alimentación previa. Carolina explicó que los alimentos ricos en grasas ralentizan el paso del alcohol a la sangre. Esto permite que el cuerpo procese el alcohol de manera progresiva, evitando la acumulación de acetaldehído.
“El gran salvador es el queso curado”, afirmó en su publicación. Además de su aporte graso, se trata de un alimento fácil de preparar antes de salir de casa. “Aparte de estar buenísimo, consigue que seamos gallitos de noche y gallitos de día”, bromeó en el vídeo.
El efecto del queso curado no está en neutralizar el alcohol ni en eliminar la resaca por completo, sino en reducir la velocidad de acumulación de acetaldehído.
Especialistas en nutrición suelen coincidir en que beber con el estómago vacío aumenta el impacto del alcohol en el organismo. Comer antes, especialmente alimentos con grasas y proteínas, puede amortiguar ese efecto. En ese sentido, el queso curado cumple con ambos requisitos.
No obstante, la propia divulgadora aclara que esto no convierte el consumo de alcohol en algo inofensivo. Se trata de una medida puntual para ocasiones especiales como las cenas y comidas de Navidad. A pesar de ello, recomienda beber de forma moderada ya que la ingesta de queso no elimina los posibles riesgos asociados a la bebida. Por otro lado, otros hábitos como hidratarse bien o evitar mezclar distintos tipos de alcohol siguen siendo fundamentales para reducir el malestar posterior.
En definitiva, la experta ofrece unos consejos prácticos para poder disfrutar estas Navidades sin vernos sobrepasados por la resaca. No obstante, lanza un mensaje de prevención y seguridad insistiendo en la importancia de no excedernos en la ingesta de bebidas alcohólicas.