La cantante Rosalía celebra este jueves, 25 de septiembre, 33 años y lo hace en un momento inmejorable. Triunfando en la música, disfrutando de la vida en Estados Unidos y feliz en el amor junto a Emilio Sakraya, la cantante catalana ha dejado atrás aquellos malos momentos de su pasado que la llevaron a los titulares.
Uno de los más conocidos fue su ruptura con el también cantante Rauw Alejandro, su relación más estable hasta la fecha y con quien mantuvo una historia de amor tan sólida que incluso se plantearon pasar por el altar.
Si bien hubo anillo de pedida por medio, no llegaron a darse el ‘sí, quiero’ debido al fin de su historia de amor, aunque sí se comprometieron a otro nivel. Consciente de lo mucho que le gustaba a la de Malamente su Cataluña natal, en febrero de 2022 se conoció que Rauw Alejandro había adquirido una casa en la localidad catalana de Manresa con la idea de vivir junto a Rosalía. El artista desembolsó unos dos millones de euros y, para que la propiedad estuviera a su gusto, realizó diferentes ajustes supervisados, pues La Casa Morera de Manresa es un Bien Cultural de Interés Local y todas las reformas que se hagan deben ser aprobadas y supervisadas por expertos.
Sin embargo, con su ruptura llegó el punto final a ese proyecto de vida en Cataluña y, dos años después de adquirir la propiedad, el puertorriqueño decidió colgar el cartel de “se vende”, rompiendo así el último anexo de unión que tenía con Rosalía. Pese a que la vivienda es de lo más atractiva, han pasado más de dos años y Rauw aún no ha encontrado comprador.
Una finca histórica y única
Originalmente, esta propiedad fue un convento, pero en 1905 el reconocido arquitecto Ignasi Oms i Ponsa la transformó en una residencia señorial por encargo del industrial Josep Portabella i Cots. Con los años, la finca ha mantenido su estilo original, conservando intactos elementos modernistas que la hacen única: suelos hidráulicos, techos abovedados, esgrafiados, chimeneas originales, vidrieras coloridas y una cuidada decoración integrada en la estructura.
La finca cuenta con un total de 30 hectáreas en las que se levanta una vivienda de más de 2.600 metros cuadrados con ocho dormitorios tipo suite, cocina reformada, bodega, dos salones de 120 y 90 metros cuadrados, terrazas acristaladas con vistas y piscina exterior con una casita de 130 metros que incluye cocina, vestidor y almacén. Además, dispone de cuatro viviendas adicionales para invitados y cuadras.
Entre sus mejores cualidades destacan las vistas: situada a cinco kilómetros de Manresa y a 65 de Barcelona, ofrece panorámicas de las montañas, especialmente de Montserrat, y su aislamiento garantiza tranquilidad y discreción. La finca cuenta con jacuzzi interior, sauna, sala de juegos, capilla y edificación para el personal de seguridad, todo protegido por una valla perimetral.