La final de Copa del Rey de esta noche, que comenzará a las 22:00, será uno de los partidos más polémicos de los últimos tiempos. Un Clásico siempre está cargado de historias alrededor del partido que lo convierten en algo mucho más que 90 minutos de juego. No obstante, el de hoy supera con creces la media.
La reacción de uno de los árbitros al ser cuestionado sobre los vídeos de Real Madrid TV (RMTV) propulsó una oleada de opiniones en redes sociales y medios de comunicación. Se llegó a plantear que el equipo de Ancelotti no disputara la final por sentirse desfavorecido, pero el club aseguró que tienen que estar por encima “los valores del fútbol”.
La previa más hostil
El FC Barcelona llega a la final en un buen momento, pues disfruta del liderato en liga y va a disputar las semifinales de Champions League. Por el contrario, el Real Madrid está eliminado en Europa y condicionado a derrotas de los azulgranas para poder competir la Liga.
Además, las lesiones parecían el principal factor a tener en cuenta, ya que ambos equipos no podrán alinear a jugadores clave, como Lewandowski y Balde en el Barça o Mbappé y Camavinga en el Real Madrid. Sin embargo, el conflicto entre el Madrid y los árbitros acabaría robando todo el protagonismo.
Cronología de la polémica
La tensión se origina en el día anterior a la final, cuando el colectivo arbitral se enfrentó a una rueda de prensa. Surge la conversación sobre cómo les afectan los vídeos de RMTV, donde señalan todos sus errores en contra del equipo blanco, y la reacción del árbitro principal sorprendió a toda la sala.
De Burgos Bengoetxea rompió a llorar relatando cómo afecta a su vida privada estos vídeos. “Cuando un hijo va al colegio y le dicen que su padre es un ladrón, eso es muy jodido”, afirmó el colegiado. El hecho de mostrarse tan afectado provocó distintas tendencias.
Por un lado, se produjo una vertiente de apoyo y defensa al colegiado, defendiendo el impacto negativo que producen estos contenidos en los que solo se muestra una parte de su trabajo en el césped. Por el otro, una sección del madridismo denuncia que de Burgos no debería arbitrar la final, pues consideran que parte con una postura en contra de su equipo.
También habló el que será el árbitro VAR del encuentro, González Fuertes. Sus declaraciones acabarían generando una reacción todavía mayor, pues acusó al canal de televisión de Valdebebas de “poner la diana en la cabeza de un compañero” con sus vídeos.
Desde que concluyó la rueda de prensa, el Real Madrid lanzó un comunicado afirmando que se había demostrado “una clara y manifiesta animadversión y hostilidad de estos árbitros contra el Real Madrid”. Habrían exigido a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) un cambio de arbitraje, algo a lo que se habrían negado rotundamente.
Algunas informaciones aseguran que el Real Madrid llegó a plantearse no presentarse en la final de Copa del Rey. Entonces, una llamada entre Louzán, presidente de la RFEF, y José Ángel Sánchez, director general del Real Madrid, habría calmado un poco las aguas, aunque siguen estando muy movidas.