El hackeo que expuso a millones de infieles casados: ¿cómo cayó la web Ashley Madison?

“La vida es corta. Ten una aventura”, es el eslogan con el que el portal de citas se promociona actualmente, estando operativo aún después de los ciberataques

Guardar

Nuevo

La filtración de información de Ashley Madison derivó en rupturas matrimoniales, problemas sociales y suicidios (Créditos: Netflix)
La filtración de información de Ashley Madison derivó en rupturas matrimoniales, problemas sociales y suicidios (Créditos: Netflix)

La plataforma de citas para casados titulada Ashley Madison sufrió en 2015 un ciberataque masivo que reveló los datos personales de 32 millones de usuarios. La filtración de información confidencial afectó a millones de personas, llevando a rupturas matrimoniales, problemas sociales y, en algunos casos, suicidios.

Ashley Madison, fundada en 2002 por el canadiense Darren J. Morgenstern, buscaba conectar a personas casadas que deseaban tener aventuras fuera de sus relaciones matrimoniales. La plataforma creció significativamente bajo la dirección de Noel Biderman, quien emplató estrategias de marketing controvertidas y provocativas para atraer usuarios. “No existe la publicidad mala. Toda la publicidad es buena”, afirmó uno de los directivos en el documental Ashley Madison: sexo, mentiras y escándalos, dirigido por Toby Paton.

En 2015, el grupo The Impact Team hackeó los servidores de Ashley Madison y filtró en la dark web los datos personales de 32 millones de usuarios. (Créditos: Netflix)
En 2015, el grupo The Impact Team hackeó los servidores de Ashley Madison y filtró en la dark web los datos personales de 32 millones de usuarios. (Créditos: Netflix)

En julio de 2015, un grupo autodenominado The Impact Team hackeó los servidores de Ashley Madison, extrayendo información delicada y amenazando con publicarla si la plataforma no cerraba. Al no cumplir con las demandas de los hackers, los datos se filtraron en la dark web (internet oscura) y se divulgaron en sitios web públicos, lo que facilitó la búsqueda de supuestos infieles. Según relatan en el documental, el ciberataque reveló nombres, direcciones, correos electrónicos y preferencias sexuales de los usuarios.

El impacto del hackeo fue devastador. En Estados Unidos, el principal mercado de la web, se desató una “caza de brujas” contra políticos, celebridades y ciudadanos comunes. Entre los casos más trágicos está el del pastor John Gibson, que era profesor en el Seminario Teológico Bautista de Nueva Orleans, quien se suicidó después de que su membresía en Ashley Madison fuera divulgada, según narró su esposa en el documental de Netflix.

El documental de Netflix, "Ashley Madison: sexo, mentiras y escándalos" fue dirigido por Toby Paton y reflexiona sobre los desafíos de la monogamia y la infidelidad en las relaciones modernas (Créditos: Netflix)
El documental de Netflix, "Ashley Madison: sexo, mentiras y escándalos" fue dirigido por Toby Paton y reflexiona sobre los desafíos de la monogamia y la infidelidad en las relaciones modernas (Créditos: Netflix)

La filtración también expuso problemas internos de la plataforma, como la creación de perfiles falsos para atraer a clientes masculinos y la falsedad de la promesa de eliminar permanentemente los datos de los usuarios al cerrar sus cuentas. Los correos electrónicos del CEO Biderman también fueron filtrados, revelando sus propias infidelidades, a pesar de presentarse públicamente como monógamo.

A pesar del escándalo y las múltiples demandas legales que llevaron a Ashley Madison a pagar 11 millones de dólares en compensaciones, la plataforma no desapareció. Bajo nueva propiedad, sigue operando y asegura contar con más de 80 millones de usuarios en todo el mundo, promocionándose como “la aplicación de citas para casados número uno”.

En Estados Unidos, la filtración provocó una “caza de brujas” contra políticos, celebridades y ciudadanos comunes (Créditos: Netflix)
En Estados Unidos, la filtración provocó una “caza de brujas” contra políticos, celebridades y ciudadanos comunes (Créditos: Netflix)

En la web, la página de inicio detalla: “Cualquiera sea el motivo que lo lleve a Ashley Madison, puede quedarse tranquilo sabiendo que no estás solo. Nuestros miembros están en pareja y buscan una conexión. Muchos de ellos están en pareja y buscan alguien afín o el poliamor. Están aquí en busca de un flirteo en línea, algo emocionante, alguien que tenga un sentimiento similar. Son estudiantes, hombres casados, solteros, oficinistas, comerciantes, empresarios, jubilados y todo lo que hay en el medio”.

Asimismo, en el apartado FAQ, la pregunta es: “¿Es seguro ser miembro de Ashley Madison?”. Y recibe la siguiente respuesta: “Desde inversiones continuas en seguridad y capacidades de moderación, hasta investigaciones de impostores que tienen como objetivo la comunidad de citas, la seguridad de nuestros miembros es nuestra prioridad. Cuando te unes a la comunidad de Ashley Madison, nos cercioramos de que tengas la mejor experiencia y la más segura en nuestra plataforma”.

La filtración también expuso la creación de perfiles falsos y la promesa incumplida de eliminar datos de usuarios en Ashley Madison. (Créditos: Captura/ashleymadison.com)
La filtración también expuso la creación de perfiles falsos y la promesa incumplida de eliminar datos de usuarios en Ashley Madison. (Créditos: Captura/ashleymadison.com)

El documental de Paton explora las motivaciones de quienes se unieron a la plataforma y cuestiona los desafíos de la monogamia en las relaciones modernas. “Todos sabemos que la infidelidad puede ser increíblemente destructiva y dolorosa”, reflexiona Paton, “pero el hecho de que Ashley Madison tuviera 37 millones de miembros nos dice algo más: comprometerse con una persona para toda la vida es algo realmente difícil”, agregó.

Guardar

Nuevo