Inesperadamente, Marcelo Gallardo puso interrogantes a su futuro en River. Justo después de haber sumado otro título como entrenador, que le otorgará la posibilidad de afrontar otra Copa Libertadores, se refirió a un desgaste propio por el fútbol argentino: "Tengo que reflexionar para saber qué quiero y cómo lo quiero".
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El Muñeco tuvo una conversación con Rodolfo D'Onofrio después de la victoria ante Rosario Central en Córdoba, pero la algarabía reinante por la conquista de la Copa Argentina quebró el molde de seriedad. Aseguró que no pretende generar especulaciones, pero aclaró: "A veces hay que salirse para pensar. Vienen las vacaciones, son cortas pero van a ayudar".
El estratega riverplatense no dejó de mencionar su comodidad y compromiso con el club, pero también hizo hincapié en la necesidad de tener "desafíos constantes". E insistió: "El objetivo del semestre está cumplido, poner a River en la Libertadores. Ese desafío me estimula y hace bien, pero hay que ver qué tengo para poder ir en busca de eso, dónde estamos parados".
Tampoco se calló a la hora de hablar de los problemas por los que transita el fútbol argentino: "Los tiempos no ayudan, los calendarios nuestros son horribles, el campeonato es horrible… Esas cuestiones te desgastan". Gallardo vislumbra un "margen grande para crecer y evolucionar" y también ve que sus elementos poseen un proceso de desarrollo importante.
Lo último que dijo, en diálogo con Fox Sports, fue: "Simplemente quiero reflexionar sobre lo que viene y pensar si las cosas realmente en mí pueden estar dadas con la misma energía para ir por una exigencia máxima".
EL CAMBIO QUE HIZO EN EL SUPERCLÁSICO
"Sigo totalmente convencido de haberlo hecho (Iván Rossi por Andrés D'Alessandro). En el mejor momento nuestro, viene el error de Augusto (Batalla) y ellos hasta ahí no eran capaces de sorprendernos con nada. Ese accidente hizo que el partido se nos vaya de las manos"
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