La presencia de una mujer de la tercera edad bailando junto a jóvenes al ritmo de música electrónica en el Parque de los Hippies de Bogotá ha provocado una oleada de reacciones en redes sociales.
El evento, animado por un DJ que impulsó la atmósfera nocturna, fue acompañado de escenas de felicidad, donde la protagonista, conocida en los comentarios como “la abuela technera”, se convirtió en el centro de atención.
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Los asistentes acompañaron el momento con expresiones de aliento como “¡vamos abuela!”, mientras la energía y la espontaneidad definieron una noche donde la tradición encontró un espacio junto a las tendencias modernas en el barrio Chapinero.
Las reacciones tras la difusión del video reflejaron el impacto positivo que tuvo la participación de la mujer mayor en un ambiente generalmente dominado por jóvenes. Frases como “Adiós artritis hola techno” y “ahí a la cuchita le dieron 20 años más de vida” circularon ampliamente, destacando el efecto revitalizante del baile y la música en la percepción de la edad.
Los lazos familiares salieron a relucir en comentarios del tipo “Es mi mami la amo. apoya a Racuna su nieto DJ”, que situaron a la mujer como la abuela del DJ que estaba tocando en la popular escena. Otros mensajes como “Amamos a la Tita” evidenciaron el cariño y respeto que la comunidad tuvo por su participación.
El espacio donde ocurrieron los hechos, conocido popularmente como Parque de los Hippies, lleva en realidad los nombres oficiales de Parque Antonio José de Sucre y Parque Julio Flórez.
Se extiende entre las calles 59A y 60, comprendiendo el área entre las carreras 7 y 9. En una nota de prensa de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte se indica que desde 1812 este punto de Chapinero se constituyó en núcleo fundamental para el crecimiento urbano de la localidad.
No obstante, su verdadero salto como epicentro cultural se produjo en los años 70, período en que el parque adquirió su identidad contemporánea, beneficiándose de la movilización y creatividad asociadas a la subcultura hippie.
Durante el auge de los movimientos alternativos en las décadas del 60 y 70, la influencia del flower power dejó una huella notoria en la zona. El parque Sucre, junto a la proximidad del Pasaje de los Hippies (un sector comercial originado bajo el principio de ser “de hippies para hippies”) y el Teatro de la Comedia, donde se realizaban conciertos de rock en español, nutrió el surgimiento de un entorno de encuentro para quienes eran identificados como “melenudos”.
El abandono que asolaba el lugar cedió ante la apropiación comunitaria, y el espacio floreció en actividades como recitales de poesía, conciertos, obras teatrales y representaciones de arte performance, además de fogatas que dotaban al parque de una atmósfera vibrante y diversa.
Lejos de perder su dinamismo con el paso del tiempo, el Parque de los Hippies se consolidó como territorio de inclusión y experimentación cultural.
En fechas como el 7 de diciembre, día de las velitas, los Escenarios Móviles del Instituto Distrital de las Artes – Idartes organizan anualmente el Electro Velitas, una celebración enfocada en reunir música electrónica, tradiciones y nuevas corrientes urbanas. Esta festividad ya ocupa un lugar asegurado en la agenda cultural de la ciudad, consolidando la función del parque como espacio de interacción abierta y convivencia.
La repercusión viral de este video donde la mujer mayor se goza el espacio bailando techno reafirma la esencia de apertura e intercambio constante que ha distinguido históricamente a este lugar emblemático en Chapinero.
El Parque de los Hippies permanece vigente como símbolo de encuentro intergeneracional y diversidad cultural en Bogotá, integrando pasado y presente en una dinámica de renovación constante a través del arte, la música y la interacción comunitaria.