Luego de más de 100 días de convivencia en La casa de los famosos Colombia, en su segunda edición, los participantes están viviendo en medio de un ambiente de tensiones relacionadas con el aislamiento y los problemas surgidos dentro de la casa. Esto es notorio para aquellos que siguen el programa, así como los que la visitan; tal fue el caso de Sebastián González, exparticipante de la primera temporada, que a los 104 días visitó el set y relató que la atmósfera dentro de la casa está en altos niveles de tensión.
El presentador indicó que en su ingreso al set, como parte de una dinámica propuesta por el Jefe, su experiencia fue emocionalmente agotadora, asegurando que la energía en el lugar era “pesada” y que esto impactó su estado de ánimo incluso después de abandonar la casa: “Cuando veo a una persona mal, me afecta. Cuando la veo bien, también me afecta”, expresó.
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De acuerdo con el relato de González, la visita a la casa le permitió recordar cómo es estar allí, aunque en esta ocasión percibió de primera mano el ambiente que viven los concursantes y explicó mediante sus redes sociales que, al entrar, sintió una tensión palpable entre los participantes, que, aunque intentaban cumplir con las actividades propuestas por el programa, mostraban señales de desánimo.
“De verdad que los pelados están súper serios, hacían la actividad, pero se notaba que no querían estar ahí. Aplaudían, pero no lo querían hacer”, comentó, refiriéndose a la actitud de los concursantes durante una dinámica organizada por el programa. Según González, esta situación refleja el desgaste emocional acumulado por los participantes, que deben equilibrar las exigencias del show con las tensiones propias de la convivencia.
Y es que el ambiente dentro de la casa no solo afecta a aquellos que permanecen en ella, sino a los visitantes ocasionales, pues Sebastián González compartió que, tras despedirse de los actuales participantes, experimentó un malestar emocional que lo llevó a sentirse “triste” y “raro”. Aunque aseguró que al día siguiente se encontraba mejor, destacó que la experiencia le permitió comprender el impacto que tiene el entorno en las emociones de las lo habitan.
“Yo soy muy sensible con las emociones de otras personas, y eso me afecta”, explicó, reiterando que la energía del lugar parece influir más en aquellos que llegan desde el exterior, ya que los concursantes podrían estar más acostumbrados a esa dinámica, lo que desata los conflictos que se ven a diario.
Y es que a pesar de que el Jefe ha implementado diversas actividades para aliviar la tensión entre los participantes, como visitas de familiares, mensajes de apoyo y la entrada de mascotas, con lo que busca mantener un equilibrio entre el entretenimiento y el bienestar emocional de los concursantes, las peleas constantes dentro de la casa parecen pasar factura.
El exparticipante aseguró que estas iniciativas no siempre logran contrarrestar el ambiente cargado que se genera tras semanas de convivencia en un espacio cerrado, pues él notó que, aunque los participantes se mostraban más relajados en ciertos momentos, la tensión era evidente.
Al parecer, la experiencia que vivió González no sería la primera, pues según comentó, otras personas que han visitado la casa en la temporada anterior también han asegurado tener sensaciones similares. Esto sugiere que el aislamiento prolongado y las dinámicas del programa pueden generar un ambiente emocionalmente desafiante tanto para los concursantes.
El testimonio de Sebastián González se convierte en un ejemplo de los notorios efectos emocionales de participar en un reality como La casa de los famosos Colombia. Incluso, los seguidores del programa consideran que también sienten esto en sus hogares: “Muchos de los televidentes ya no aguantamos más ver el programa, porque esa energía está traspasando la pantalla”.