Rodrigo Duterte continúa endureciendo su discurso. El presidente filipino ordenó este lunes a la Policía de su país a "matar" a los "idiotas" que se resistan violentamente a ser detenidos.
Las palabras del polémico mandatario tienen lugar dos días después del funeral de un joven que fue abatido en Manila y abandonado por oficiales antidroga.
"Su deber les exige superar la resistencia de la persona que está arrestando. Si se resiste, y es violento, son libres de matar a esos idiotas. Es mi orden", aseveró Duterte durante un discurso en la capital filipina.
El joven estudiante Kian Delos Santos fue abatido por agentes oficiales el pasado 16 de agosto en un oscuro callejón de Manila. Según testigos, recibió un disparo de los uniformados en la cabeza y luego fue abandonado junto a la basura, según consigna Daily Mail.
Este hecho generó una gran polémica en el país.
Sin embargo, la Policía aseguró que actuó en defensa propia y acusó de Delos Santos de abrir fuego contra ellos. Relato que no se asemeja a lo dicho por los testigos.
Asimismo, el portavoz de Duterte, y el ministro de Justicia filipino, describieron el hecho como "un caso aislado".
Desde que llegó al poder en junio del año pasado, Duterte desató una brutal guerra contra el narcotráfico, que ya se cobró la vida de miles de personas.
No obstante, gran parte de la comunidad internacional criticó la violencia empleada por Duterte.
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