Cuál fue el origen de las llaves y quién las inventó

La llave es un artefacto simple que fue desarrollado por civilizaciones antiguas precristianas y perfeccionado a lo largo de varios siglos antes de adquirir su forma actual

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Las llaves han tenido diferentes significados a  nivel político y religioso a lo largo del tiempo. Foto: Getty Images
Las llaves han tenido diferentes significados a nivel político y religioso a lo largo del tiempo. Foto: Getty Images

La llave es un instrumento inventado hace muchos siglos, al cual se le han atribuidos diferentes significados a nivel político y religioso a través del tiempo. El artefacto con características similares a las del utilizado en la actualidad, metálico y de tamaño pequeño, fue creado por los romanos, quienes la ocupaban comúnmente en cofres o cajones y no en puertas.

Las llaves pequeñas fueron creadas por la civilización romana. Foto: Getty Images
Las llaves pequeñas fueron creadas por la civilización romana. Foto: Getty Images

Sin embargo las llaves romanas, que eran tan diminutas que incluso se utilizaban como anillo, no fueron las primeras en la historia. El inventor reconocido de este artilugio es el griego Teodoro de Samos, quien la inventó en el siglo VII a.C con un diseño en forma de hoz fabricado en hierro y un mecanismo sencillo, ya que simplemente pasaba en recto a través de un orificio de la puerta y luego se giraba.

Pero existe constancia histórica de que su origen más remoto está en civilizaciones anteriores a la de Grecia y Roma. En realidad, la llave es un invento surgido en el Antiguo Egipto, donde la clase alta lo ideó como un método para proteger sus pertenencias. Las llaves egipcias no tenían la misma dimensión que las actuales, de hecho eran muy grandes, al igual que los cerrojos de madera que protegían la entrada a las edificaciones.

En ese entonces, además de su utilidad como mecanismo para abrir cerraduras, se le atribuyó un significado místico. Los jeroglíficos muestran al rey Anubis sosteniendo la llave de las puertas del Más Allá, se trataba de un objeto de tres dientes que se colocaban hacia arriba y elevaban las tres clavijas que componían el cerrojo, permitiendo abrir el portón.

Las llaves son símbolos en el cristianismo. Su paso por la historia ha quedado registrado en la Biblia. Foto: Getty Images
Las llaves son símbolos en el cristianismo. Su paso por la historia ha quedado registrado en la Biblia. Foto: Getty Images

Las llaves aparecen también en las crónicas bíblicas. En el Antiguo Testamento se hace referencia a ellas en siglos anteriores al nacimiento de Jesús, así, en el libro de Nehemías son mencionadas en un pasaje que relata la reparación de las puertas de Jerusalén en el año 445 a.C.

Otra mención de la llave en la Biblia está en un fragmento del profeta Isaías, en el cual se describe que se llevaba colgada al hombro. Además, históricamente la divinidad y los santos han sido descritos como poseedores las llaves del Reino de los Cielos.

Siglos después de Cristo este artefacto fue adoptado como un símbolo de cortesía pero también de rendición militar. En ese sentido, los regidores entregaban simbólicamente las llaves de su ciudad a sus invitados más distinguidos y en otras ocasiones, cuando perdían ante sus enemigos en un conflicto bélico, las entregaban en señal de aceptación de su derrota.

La “Rendición de Breda” retrata a un general holandés entregando las llaves de su ciudad en señal de derrota. Foto: Historia National Geographic
La “Rendición de Breda” retrata a un general holandés entregando las llaves de su ciudad en señal de derrota. Foto: Historia National Geographic

Una de las pinturas más famosas que retratan este acto simbólico, en el que la llave es protagonista, es la Rendición de Breda pintada por Diego de Velázquez. En ella aparece Justino de Nassau frente a un ejército de lanceros, entregando las llaves del territorio holandés al general Ambrosio de Spínola, quien ganó una de las batallas de la Guerra Europea de los Treinta Años en 1625.

La fabricación de llaves durante esa etapa, el siglo XVII y en el XVIII, adquirió gran prestigio en Nuremberg, Alemania. El lugar se convirtió en un centro metalúrgico donde se fabricaban cerraduras, candados y cajas fuertes admiradas en toda Europa por su calidad y tecnología.

Las llaves modernas surgieron en la época victoriana. Joseph Bramahes fue uno de los impulsores de grandes cambios en la cerrajería y diseñó la llave de puntos, que comenzó a ser fabricada en 1784 y que se produce hasta hoy en día.

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