Coronavirus: EEUU emitió nuevas recomendaciones a personas mayores y a personas con afecciones médicas crónicas graves para protegerse

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) han emitido algunas recomendaciones a los adultos mayores y a las personas que tienen afecciones médicas crónicas graves ante la expansión y el peligro del Covid-19.

En su boletín más reciente, los CDC enfatizaron que estos sectores de la población estadounidense son los más vulnerable, pues “tienen un mayor riesgo de contraer coronavirus”.

Y es que a medida de que las personas envejecen, sus sistemas inmunológicos cambian, lo que dificulta que sus cuerpos combatan enfermedades e infecciones, así como sus recuperaciones.

Si bien los CDC no especifican qué edad califica como una “persona mayor”, mencionan que el Covid-19 puede ser más grave en las personas que tienen más de 60 años y es aún peor en las personas con más de 80.

Lo mismo ocurre en aquellas personas con enfermedades cardíacas, pulmonares o renales.

Para protegerse contra la enfermedad, pidió a dicho sector “quedarse en casa tanto como sea posible” y evitar actividades con grandes multitudes, como viajar en avión, ir al cine, ir de compras a centros comerciales, a servicios religiosos, e incluso, asistir a eventos familiares.

Además de seguir las recomendaciones básicas que ha hecho la Organización Mundial de la Salud (OMS), como lo es lavarse bien las manos, evitar tocarse la cara y limpiar regularmente las superficies de alto contacto en su propio hogar: como mesas, manijas de puertas, interruptores de luz, las manijas, grifos, lavabos, computadoras y teléfonos.

Si el brote de coronavirus comienza a extenderse a través de una comunidad local, las personas vulnerables deben abastecerse de suficientes medicamentos y alimentos para “quedarse en casa por un período de tiempo”.

En estos casos, lo mejor es mantenerse en contacto con otras personas por teléfono o correo electrónico, sobre todo si se requieren más suministros.

Asimismo, los vulnerables deben buscar atención inmediata si desarrollan “síntomas de emergencia”, que incluyen fiebre, tos y dificultad para respirar.

Según la OMS, las personas con enfermedades leves se recuperan en aproximadamente dos semanas, mientras que aquellas con enfermedades más graves pueden tardar entre tres y seis semanas en recuperarse.

En China continental, donde el virus explotó por primera vez, hay más de 80,000 personas que han sido diagnosticadas y más de 58,000 se han recuperado hasta ahora.

En cuanto a los Estados Unidos, ahora hay más de mil casos de contagio, 28 muertos y ocho pacientes recuperados.

Medidas más estrictas

Las tiendas de Costco han comenzado a ajustar las raciones que habían puesto en los productos en un intento por distribuir la oferta.

Por su parte, Kroger redujó la cantidad de paquetes de harina, azúcar y arroz que cada cliente puede comprar de cinco a dos por persona. De igual forma ha establecido límites en ciertos artículos, como productos para el resfriado y la gripe, a cinco por pedido.

En California, miles de clientes se vieron obligados a hacer fila afuera de las tiendas debido a las grandes multitudes que intentaban ingresar. Las filas de personas con carritos de compras era tan largas que atravesaron el estacionamiento.

El Festival Coachella, el gran evento de música previsto para los fines de semana del 10 y 17 de abril, en el desierto de California, fue oficialmente pospuesto este martes por los organizadores debido al avance del coronavirus. La empresa organizadora Goldenvoice explicó en un comunicado que actuaron de acuerdo a directivas del Condado de Riverside y que la medida afecta también al Festival Stagecoach, de música country, que iba a realizarse entre el 24 y el 26 de abril.

También fue cancelado el festival anual de música electrónica ultra, ciudad de Florida, que atrae a más de 160.000 personas cada año. Estaba previsto entre el 20 y el 22 de marzo.

El virus ha sacudido los mercados mundiales, con las acciones sufriendo su peor golpe de un día en Wall Street desde 2008 y los precios del petróleo sufriendo sus pérdidas más brutales desde el comienzo de la Guerra del Golfo de 1991.

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