Activan plan de contingencia medioambiental en Catatumbo por derrame de crudo

Las autoridades de Norte de Santander pusieron en marcha un plan de contingencia este 16 de noviembre para evitar afectaciones severas al medioambiente como consecuencia de un derrame de crudo en el departamento. La situación se originó en la mañana de este mismo lunes, cuando se reportó un ataque al oleoducto Caño Limón - Coveñas, puntualmente a la altura de la vereda El Empalme, del corregimiento La Gabarra, adscrita al municipio de Tibú.

La compañía hizo un llamado a los habitantes de la zona para que se abstengan de acercarse al lugar del incidente, hasta tanto culminen las labores de contención y mitigación. Así mismo, se indicó que por ahora no se está viendo afectada el agua que suple a las comunidades aledañas.

Además de las autoridades administrativas del departamento, el Ejército Nacional también hace presencia en la zona para contrarrestar la situación. Se necesita la intervención de la fuerza pública ya que Tibú está dentro del Catatumbo, una de las subregiones que más sufre la violencia en el país. Los uniformados tienen la tarea de permitir la entrada del personal técnico que inicialmente evaluará la causa de este atentado y que ha causado una emergencia.

Por el momento se maneja la hipótesis de que grupos armados provocaron el derrame al atacar el oleoducto. No se ha atribuido el hecho a un estructura en particular, pues allí hacen presencia más de cuatro organizaciones ilegales entre las que destacan las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), el Ejército de Liberación Nacional (ELN), las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, (AGC), también conocidas como Clan del Golfo, y el Ejército Popular de Liberación (EPL).

Ellos se están enfrentado por el territorio, ya que este es un punto estratégico para controlar rutas de narcotráfico y trochas fronterizas con Venezuela. En esta pelea los distintos entes violan los derechos de los civiles, los uniformados e, incluso, se ve afectado el medioambiente. De hecho, con este ya van ocho atentados al oleoducto Caño Limón - Coveñas en lo que va de 2021.

Justo antes de que ocurriera este nuevo ataque, desde Cornopor se estaba realizando un trabajo para evaluar los daños ambientales que se han producido por los atentados pasados. Se señaló que están en riesgo más de 4.000 personas que habitan en la zona.

Para finalizar, las autoridades rechazaron estas acciones e hicieron un llamado para que cesen los delitos contra la infraestructura. Reiteraron que se pone en riesgo la integridad de las personas y se generan graves consecuencias al medioambiente.

SEGUIR LEYENDO: