El Gobierno cubano ve avances en el control de la epidemia de chikunguña y dengue

Guardar

La Habana, 15 dic (EFE).- El Gobierno cubano aseguró este lunes que el brote de chikunguña y dengue en Cuba avanza "hacia una mejoría en el control", aunque "todavía la curva" en la gráfica de nuevos casos "sigue en la zona de epidemia".

La viceministra de Salud Pública, Carilda Peña, hizo estas declaraciones en la televisión estatal, en donde apuntó, sin dar cifras absolutas, que se han reducido en un 21 % con respecto a la semana previa los nuevos casos de síndrome febril inespecífico (la fiebre alta es el primer síntoma de ambas arbovirosis).

Con respecto al dengue, reconoció que la tasa de incidencia la semana pasada se elevó hasta los 15,25 infectados por cada 100.000 habitantes. Esto, sobre una población total de 9,7 millones de personas -según la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI)- supondría unos 1.480 nuevos infectados.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS), que recoge cifras oficiales cubanas, indicó la semana pasada que, desde principios de año y hasta finales de noviembre, el número de contagios totales en lo que va de 2025 por esta enfermedad en Cuba ascendía a 25.995.

Sobre el chikunguña, Peña tampoco aportó cifras sobre casos nuevos o totales, pero afirmó que se ha reducido en un 20 % el número de nuevos infectados. El viernes las cifras oficiales hablaban de 44.604 contagios.

La viceministra tampoco hizo referencia al número de fallecidos por la epidemia, que el viernes se elevó a 47, según cifras oficiales. Dos tercios de ellos eran menores de edad.

La atención del Ministerio de Salud Pública (Minsap) está en "neonatos, lactantes, embarazadas y jóvenes", aseguró Peña.

El número de pacientes en cuidados intensivos se redujo hasta los 42, de los cuales 12 se encuentran en estado crítico (en su mayoría, menores de edad). "La tendencia sigue siendo a la disminución", agregó la viceministra.

EFE ha contactado al Gobierno cubano para tener acceso a más datos sobre la epidemia, pero hasta el momento no ha tenido respuesta.

Las autoridades sanitarias han reiterado que las cifras de infectados son un subregistro, porque muchos enfermos no acuden a los centros médicos (principalmente por el deterioro de los servicios públicos en la isla).

El Gobierno cubano reconoció por primera vez el 12 de noviembre que el país sufría una epidemia de chikunguña y dengue, pese a que los primeros casos se diagnosticaron en julio y que las infecciones se habían disparado en septiembre y octubre.

La epidemia ha encontrado en Cuba un terreno fértil para extenderse debido a la grave crisis económica y energética que sufre el país, que ha llevado a un notable deterioro de los servicios públicos.

Esto limita la capacidad de prevención -de la fumigación masiva contra los mosquitos a la recogida sistemática de basuras-, el control -con tests para confirmar el tipo de enfermedad- y la atención a los enfermos, por falta de medicamentos y otros insumos sanitarios. EFE