El éxito de la película El Clan reavivó el interés por todo lo que tenga que ver con los Puccio y el caso policial que convirtió a esa familia en un símbolo del horror en la década del 80.
Sobre la figura de Arquímedes -líder del grupo que secuestró y asesinó a tres empresarios entre 1982 y 1985- se habló y escribió mucho, al igual que sobre lo que sucedió con algunos de sus cinco hijos. Sin embargo, poco y nada se supo de Adriana, la menor de ellos.
La mujer, que tenía 15 años cuando la policía allanó su casa (el 23 de agosto de 1985), fue hallada por la Revista Noticias, que recogió algunos datos para reconstruir qué fue de su vida en estos 30 años.
La menor del clan Puccio se cambió el apellido y vive con absoluto bajo perfil. A lo largo de su vida trabajó como empleada en una editorial, en un banco y hoy se desempeña en un negocio naviero.
Cuando estalló el escándalo policial, Adriana Puccio quedó al margen de la acusación porque los jueces creyeron que ella no estaba al tanto de que su familia estaba conformada por secuestradores y asesinos que alojaban a las víctimas en su casa de San Isidro.
Inicialmente la adolescente fue a parar a un instituto de menores, donde permaneció alojada durante dos días. Luego las autoridades decidieron darle la custodia de la menor a sus tíos. Hoy lleva una vida normal y se sacó el peso del apellido.