El uno por uno: cómo rindieron los jugadores de la Argentina contra Nigeria

El retroceso fue una complicación en el equipo de Sabella, que ganó 3-2 con un gran aporte de Messi

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 AFP 162
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Se terminó la participación en la fase de grupos del Mundial Brasil 2014 para la selección argentina. El puntaje perfecto por haber ganado los tres partidos no es reflejo del rendimiento. El 3-2 que da paso a los octavos de final es la evidencia de que el funcionamiento defensivo necesita ajustes.

En el repaso de los rendimientos particulares, se ve que la primera línea mostró una falta de coordinación al momento de retroceder. Eso dejó expuesto al arquero, que todavía muestra signos de solidez. Mascherano fue lo más destacado de un mediocampo que tuvo a Gago más pasivo en ofensiva, pero a Di María más conectado con el ataque.

Messi fue la figura en ofensiva y mostró que, a pesar de que todavía tiene cortocircuitos con sus acompañantes, es determinante desde la genialidad.

Sergio Romero: sufrió un gol en el primer avance rival, su estirada no fue suficiente en el gol de Nigeria. De todos modos, no tuvo responsabilidad. En el resto de la primera etapa no tuvo trabajo. Está seguro con los balones llovidos y los envíos aéreos. Su exposición es solamente por las desatenciones defensivas.

Pablo Zabaleta: en el primer gol de Nigeria intentó cortar al que llevaba la pelota y luego quedó a mitad de camino para tapar el remate de Musa, el autor del gol. Acompañó en algunos ataques, pero su sector fue la zona más fructífera para el rival. Ahmed Musa, autor de los goles africanos, jugó por su carril. A pesar de algunos quites, mejor para el avance que para el retroceso.

Ezequiel Garay: estuvo bien en las coberturas del primer tiempo que surgieron por pases frontales, tanto a la espalda de Zabaleta, como a la de Fernández y Rojo. Sin embarg, no tuvo voz de mando en los goles: en el primero tendría que haber cortado el avance y en el segundo no se complementó correctamente con su pareja de la zaga central.

Federico Fernández: mostró desconcierto en algunos movimientos defensivos, sobre todo en el segundo gol nigeriano. Quedó del mismo lado que Garay y dejó el espacio para que el delantero Ahmed Musa se fuera de cara al gol. Inestable para los marcajes individuales.

Marcos Rojo: formó un tándem interesante con Di María, pero estuvo flojo en su perfil defensivo. No ofreció marcajes firmes, estuvo débil en el "uno contra uno". Sacó su mejor versión en ataque, con excelentes desbordes profundos. Marcó un gol importante en un tiro libre a favor. Es peligroso en el área rival en la pelota parada, es una faceta que ya exhibió en las dos primeras presentaciones del equipo.

Fernando Gago: siempre estuvo a la derecha de Mascherano. Dejó su función en la gestación y estuvo pendiente de jugar simple para salir rápido de la presión nigeriana. Intervino poco, solamente limpió cuando aparecía la congestión, sobre todo con pases horizontales. Siempre se desprendió rápido del balón. En el segundo gol rival, quiso quitar la pelota y dejó le sirvió el empate a Musa.

Javier Mascherano: Cortó, luchó, siempre pasó la línea de la pelota y fue el bombero de los espacios libres en el mediocampo. Siempre a tiempo. Puso un buen pase en cortada a Di María en el primer gol. Su movilidad fue constante, mostró más sacrificio que en los primeros dos partidos. Se cansó de sumar quites en los últimos metros de Nigeria y, en líneas generales, entregó bien la pelota para recuperar la posesión. Tapó muchas falencias. Fue un imán para controlar la pelota.

Ángel Di María: uno de los que más corrieron en la temporada, de los últimos en sumarse al grupo, y sigue corriendo. Abrió espacios, fue protagonista en la ofensiva y también colaboró en el retroceso. Probó mucho de media distancia, estuvo cerca de hacer su gol. Gran sacrificio.

Lionel Messi: la segunda pelota que cayó en sus pies fue gol. Rompió por el centro y fusiló el arco de Nigeria. Después encabezó algunos ataques, pero contó con poco espacio, falta de compañía o carencia de interpretación en el resto del equipo. Se lució con dos tiros libres: en el primero hizo volar a Enyeama y en el segundo ni siquiera le dio posibilidad de responder, un golazo. Se retiró a los 20 minutos de comenzado el segundo tiempo. No logra complementarse con el equipo, pero individualmente aporta mucho. Una de las figuras, sin dudas.

Gonzalo Higuaín: irregular. Hizo buenas diagonales para quedar frente al arco de Nigeria y mostró que está afianzado para jugar de espaldas y ofrecerse como pivot. Pero no estuvo preciso en la construcción, sobre todo con los pases a un toque. Cuando quedó de cara al gol estuvo lento para llegar antes que el arquero Enyeama. Salió exhausto en los minutos finales.

Sergio Agüero: mostró muy poco, casi no intervino. No entró en circuito ofensivo, a penas presionó la salida de Nigeria, hasta se lo vio cerca del banco bebiendo agua en pleno partido. Era evidente que tenía alguna molestia. A los 35 minutos se sentó en el césped y pidió el cambio.

Ezequiel Lavezzi: se colocó en el extremo derecho. En varios pasajes se retrasó unos metros para colaborar con la presión. Estuvo veloz en los desbordes y correcto en las combinaciones. Armó una buena jugada con Di María en un tiro libre y dejó las restricciones posicionales en los últimos minutos para moverse por todo el frente ofensivo. Un rendimiento interesante, sumó.

Ricky Álvarez: reemplazó a Messi, que era la figura argentina. Generó preocupación, fabricó faltas. Nunca cedió fácilmente la pelota, ni en la incomodidad de varias marcas en simultáneo. Cumplió, era su debut mundialista.

Lucas Biglia: sustituyó a Higuaín en los minutos de descuento.