En un duelo entre dos equipos con un estilo similar y dos entrenadores con filosofías de juego parecidas, el vencedor fue el cuadro alemán, que impuso su supremacía y con la jerarquía de sus futbolistas consiguió una importante victoria de visitante.
En el Emirates Stadium de Londres, Bayern Munich superó por 2 a 0 a Arsenal, con goles de Toni Kroos y Thomas Muller en el complemento, por la ida de los octavos de final de la Champions League. La vuelta se disputará el 11 de marzo en Alemania.
De la mano de Josep Guardiola, los defensores del título fueron superiores durante los 90 minutos y con paciencia consiguieron superar a un rival que planteó un encuentro de ida y vuelta, hasta que antes de los 10' Özil erró un penal y el equipo se derrumbó.
En los primeros minutos los dos presionaban, tenían la pelota cuando la recuperaban y buscaban un juego directo para llegar al arco rival. Las primeras situaciones fuero para la visita, pero el local encontró un hueco en la zona derecha de la defensa y generó peligro por ese lado con un serie de aproximaciones.
A los 8', Boateng cruzó a Özil dentro del área y el árbitro sancionó penal. El alemán tomó la ejecución pero Neuer, con quien compartió ciudad y colegio, adivinó la intención y con la mano derecha desvió el débil remate del ex volante de Real Madrid.
A partir de allí Bayern Munich creció en el juego, empezó a dominar el encuentro y con la posesión del balón se plantó en campo rival. Así tuvo las mejores oportunidades pero no lograba concretar. Los ingleses sin ideas y faltos de reacción aguantaban.
A los 37' Szczesny derribó a Robben en el área menor y nuevamente el árbitro sancionó penal y expulsó al portero. El encargado de la ejecución fue David Alaba, quien desvió el remate, que se fue rozando el poste derecho del recién ingresado Fabianski.
En la segunda parte fue todo de los alemanes, los locales con un hombre menos se refugiaron cerca de su arquero y lo pagaron caro. Con Kroos como director, el elenco de Guardiola hizo circular el balón, yendo de un lado al otro por la periferia del área rival y con paciencia encontró los espacios ante la pasividad del rival.
A los 8' del complemento, fue el propio Kroos quien abrió el marcador con disparo de larga distancia que superó la estirada del arquero. El Bayern no se desesperó y siguió dominando el encuentro, aunque se repitió en centros y le costó generar situaciones de riesgo. Pero a tres minutos del final en un nuevo envió aéreo, Thomas Müller se adelantó a su marcador y puso cifras definitivas en el marcador.
Al Arsenal, con poco margen de maniobra luego de que Wegner hiciera dos cambios obligados –lesión de Gibbsy expulsión de Szczesny- y 10 hombres en toda la segunda parte, nunca reaccionó y cayó sin atenuantes.
La revancha será el 11 de marzo, y los "Gunners" deberán conseguir una victoria por dos tantos para aspirar a llegar a los cuartos de final y vengarse de las eliminaciones sufridas en 2005 y 2013 ante los alemanes. El año pasado luego de perder de local, los ingleses ganaron de visitante pero quedaron fuera de competencia por diferencia de gol.