Julio Humberto Grondona llegó a la presidencia de la Asociación del Fútbol Argentino en 1979, y ahora declaró que cumplirá su contrato hasta 2015.
"Tengo que finalizar un mandato que termina en 2015. En este momento no lo debo hacer (renunciar), me encuentro perfectamente bien, hay que seguir. Si no tuviese mandato hasta 2015, me iría ya", informó.
El máximo dirigente del fútbol argentino interpretó que su rol local le brinda un poderío internacional que no puede abandonar: "Tengo un cargo muy importante a nivel internacional y se perdería ese cupo para representar a Argentina y Latinoamérica a nivel mundial".
El mandatario de 82 años lleva siempre un anillo característico con la leyenda "todo pasa" en su interior. Le consultaron y dijo que desde que falleció su esposa no lo utiliza más. "La muerte de mi esposa no pasa más", lamentó.
Tuvo tiempo para hablar de Lionel Messi, un pedido muy especial por parte del ganador de cuatro Balones de Oro: "Messi pidió jugar en Newell's por Eliminatorias. Si el club cumple con la reglamentación, lo haremos allí".
Un cuestionamiento recurrente es el de las barras bravas en el fútbol argentino y latinoamericano, sobre el tema dijo que "siempre existieron" pero ahora se empeora porque "hay mucha droga y alcohol".
En su entrevista para la emisora argentina Radio 10, despejó dudas sobre la realidad de Mauro Icardi, un juvenil argentino que brilla en la Sampdoria y que Italia pretende nacionalizar:
"Lo tenemos en cuenta, pero el que decide es el jugador, él va a decidir dónde va a jugar. Si quiere jugar para Argentina va a jugar en Argentina, y si quiere jugar para Italia va a jugar en Italia".