Nadie soporta más de 45 minutos sin enloquecer en esta cámara del silencio

La cámara anecoica de los Laboratorios Orfield mide el ruido en decibeles negativos y desafía a las personas a que vivan la experiencia. Para qué sirve el lugar más silencioso del planeta

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La cámara anecoica por dentro
La cámara anecoica por dentro

Hay un lugar en el planeta en donde se escucha el silencio. El más profundo y absoluto silencio, sin que se interrumpa por el menor ruido externo. Allí nada se escucha, solo el silencio. Pese a que parezca el lugar más tranquilo de la Tierra, lo cierto es que se puede soportar muy poco tiempo dentro.

Es la cámara anecoica de los Laboratorios Orfield, en Minnesota. El recinto es tan silencioso que el ruido de fondo se mide en decibeles negativos. Steven Orfield, fundador del laboratorio, presentó un desafío: "Retamos a la gente a que se sienta en la cámara en la oscuridad. Una persona logró permanecer allí durante 45 minutos".

El récord de permanencia fue de 45 minutos
El récord de permanencia fue de 45 minutos

No más que eso. Solo 45 minutos. Orfield cuenta que mientras alguien está en la cámara tranquilo, los oídos se adaptan. Cuanto más silenciosa es la habitación, más cosas se escuchan. "Oirás el latido de tu corazón, a veces podrás oír tus pulmones, oír tu estómago crujir ruidosamente. En la cámara anecoica, te convertís en el sonido", describió.

La cámara anecoica les debe su condición de ser el lugar más silencioso del planeta a dos factores. Por un lado, está diseñada para absorber todas las reflexiones producidas por ondas acústicas o electromagnéticas. Por otro, la sala se encuentra aislada de cualquier fuente de ruido.

Está diseñada para absorber todos los sonidos
Está diseñada para absorber todos los sonidos

Gracias a las dos características, la habitación tiene las mismas condiciones acústicas que tendría un campo despojado de influencias sonoras. Más allá del desafío planteado por su creador, su objetivo trasciende la "tortura". Sirve como campo de prueba de productos de distintas compañías, para conocer cómo suenan y, a su vez, la NASA envía astronautas para colaborar con su adaptación al silencio del espacio.

Para el común de las personas, sin embargo, la cámara resulta una experiencia perturbadora. Es un lugar que desorienta y provoca la pérdida del equilibrio. "Cada persona se orienta a través de los sonidos que oye cuando camina. En la cámara anecoica, no hay señales", le dijo Orfield a Daily Mail. "Se eliminan las señales perceptivas que le permiten mantener el equilibrio y maniobrar. Si alguien está allí por media hora, tiene que sentarse en una silla".

La cámara de Microsoft
La cámara de Microsoft

Recién en 2015, una habitación desbancaría su condición. Desde que Microsoft creó su propia cámara anecoica, el libro de los Récord Guinness tomó nota y la nombró como "el lugar más silencioso del mundo". En ese entonces, el ruido del interior alcanzó un impresionante -20,6 decibeles o, como Microsoft prefiere llamar, "justo en el borde de la física".

El recinto debe su incomparable silencio a seis capas que lo recubren y contribuyen a bloquear cualquier sonido. Cada pared tiene un grosor de 30 centímetros, lo que la vuelve impenetrable. Al punto de que si un avión despega al lado del edificio, apenas se podría escuchar un susurro.

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