Para monseñor Héctor Aguer, la pedofilia y los femicidios "son culpa del divorcio"

El arzobispo de La Plata aseguró que “los actos homosexuales son intrínsecamente contrarios a la ley natural”

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El papa Francisco junto a Monseñor Aguer
El papa Francisco junto a Monseñor Aguer

El arzobispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, volvió a formular polémicas declaraciones, al afirmar que la pedofilia y los femicidios son "culpa del divorcio".

El prelado sostuvo que no permite el ingreso de seminaristas que confiesen su homosexualidad. "No ordeno a un candidato que no me diga que le gustan las chicas. Un sacerdote homosexual nunca debe ordenarse", indicó al respecto.

"A los muchachos que vienen a verme porque quieren entrar al seminario les pregunto: ¿te gustan las chicas? Yo no ordeno a un candidato que no me diga que le gustan las chicas", señaló.

Para Aguer, "los actos homosexuales son intrínsecamente contrarios a la ley natural, cierran el acto sexual al don de la vida. Las personas homosexuales están llamadas a la castidad, mediante virtudes de dominio de sí mismo, que eduquen la libertad interior".

En la misma línea, el arzobispo de la capital bonaerense aseguró que el papa Francisco no es "gay friendly" por haber dicho que no deben ser marginados de la Iglesia los homosexuales, y consideró que fue una tergiversación que los medios hicieron de los dichos del Pontífice.

El arzobispo de La Plata, Héctor Aguer (NA)
El arzobispo de La Plata, Héctor Aguer (NA)

En cuanto a los abusos sexuales a menores, dijo que la mayor parte de estos se dan en el ámbito familiar. "Principalmente son los padrastros, las parejas de las mujeres, aunque a veces también son los propios padres", señaló, y agregó: "Todo eso tiene que ver con la disolución del vínculo familiar que estaba fundado en el matrimonio indisoluble".

Finalmente, hizo referencia a los numerosos femicidios ocurridos en los últimos tiempos y los atribuyó a la "desaparición del matrimonio".

"La racha de los nuevos femicidios tiene que ver con la desaparición del matrimonio. El matrimonio dignificaba a la mujer, la ponía en un lugar de igualdad con el hombre. Le daba una estabilidad a la familia y a la mujer un respaldo. El matrimonio no existe más hoy día, es un rejunte provisorio. Antes no había violencia en el grado en que la vemos hoy", añadió Aguer en declaraciones al periodista Franco Torchia en Radio Ciudad.

 

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