La estrategia de Vidal para ganar las elecciones legislativas

Por Alberto Valdez

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A casi seis meses de gestión en la provincia de Buenos Aires, en el entorno de la gobernadora María Eugenia Vidal comentan que "lo peor ya paso" y explican que se lograron dos de los objetivo más difíciles: aprobaron en la Legislatura, con apoyo del massismo, las herramientas legislativas que necesitaban de acá hasta fin de año (Presupuesto y las emergencias en cada área) y con la reciente negociación con la Salud, terminaron de cerrar todas las negociaciones paritarias, con menos costo político y social del esperado.

Los operadores de María Eugenia no solo piensan como la Casa Rosada en el segundo semestre sino que además ya analizan el 2017 y el proceso electoral. Creen que los logros obtenidos a nivel parlamentario y sindical les abre un panorama más relajado de acá a fin de año. Por eso ahora quieren seguir con mayor atención de lo habitual el escenario social, sobre todo en el segundo y tercer cordón del Gran Buenos Aires.

Conscientes de lo difícil que es administrar desde la Gobernación bonaerense las demandas de los sectores más vulnerables en pleno ajuste, Vidal armo un gabinete de crisis con funcionarios que la acompañaron en el Ministerio de Desarrollo Social porteña. La gobernadora y su mano derecha, Federico Salvai, ministro de gobierno, trabajaron juntos en esa cartera junto al actual titular del área a nivel bonaerense, Santiago Lopez Medrano. Los tres vienen de una experiencia interesante en materia de vínculos y contactos con todas las organizaciones sociales. Sobre todo con el Movimiento Evita, de Emilio Pérsico y el Chino Navarro, el de mayor peso territorial en el GBA. Y por las dudas cuentan con el apoyo de emergencia de la ministra del gobierno nacional, Carolina Stanley, esposa de Salvai y amiga de la gobernadora.

Por eso en la Casa de Gobierno de La Plata, sin subestimar la cuestión, se sienten aliviados con los acuerdos que tienen con las organizaciones sociales. La principal preocupación se las genera el foco conspirativo que lideran desde La Matanza Fernando Espinoza y su sucesora en el poderoso municipio Verónica Magario. "Si a nosotros nos va bien el año que viene en las elecciones hay una generación de dirigentes del PJ que deberán jubilarse por eso no habría descartar que nos intenten armar un estallido para hacernos tambalear", dicen cerca de la gobernadora.

Consideran que la mayoría de los intendentes del FPV no quieren agitar el avispero ni jugar con fuego. En ese grupo incluyen a Martín Insaurralde (La Matanza), Juan Zavaleta (Hurlingham), Gustavo Menéndez (Merlo) y Gabriel Katopodis (San Martín). Desconfían de Jorge Ferraresi (Avellaneda) Walter Festa (Moreno) y Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas).

Pero las mayor desconfianza se la genera La Matanza por el dúo Espinoza-Magario y el desembarco de ex funcionarios nacionales K a ese municipio como Debora Giorgi y Roberto Feletti. Sin duda, ahí ponen la mayor atención, energía y recursos. Saben que un operativo no espontáneo armado en un supermercado por el kirchnerismo matancero podría generarles un dolor de cabeza con pronóstico reservado.

Respecto al proceso electoral del año próximo, cerca de María Eugenia se muestran absolutamente pragmáticos. Como el objetivo es ganar en las urnas y saben que no va a ser sencillo no descartan ningún escenario. Más allá de los últimos roces en Elisa Carrio y la Casa Rosada, a ellos igual le entusiasma la candidatura a senadora de la líder de la Coalición Cívica.

Sostienen que actualmente es la mejor candidata que puede presentar Cambiemos pero al mismo tiempo creen que deben preparar un Plan B con Jorge Macri o Esteban Bullrich porque algunos macristas apuestan a que Lilita se presente Capital para evitar que Martín Lousteau abandone la Embajada en Washington para competir electoralmente ahora dentro de Cambiemos y transformarse en un rival de Horacio Rodríguez Larreta por el gobierno porteño.

En la vereda de enfrente quieren varias ofertas peronistas y por eso en el PRO no desean que las PASO sean obligatorias. Les gustaría ver a Florencio Randazzo, Daniel Scioli y hasta Cristina Kirchner compitiendo por afuera del FPV. En ese escenario lo ven complicado a Sergio Massa. Sobre todo si la ex presidenta decide jugar en Buenos Aires como quieren varios. Esa polarización lo pondría más cerca del tercer lugar. Aunque los voceros de Vidal creen que el ex intendente de Tigre intentará convencerlos que el puede ser el mejor candidato para Cambjemos. Sin duda, esta abierto el libro de pases y no hay que descartar ningún experimento electoral que hoy pueda sonar estrambótico.