Se relacionó con mafiosos, políticos y boxeadores. Inspiró una película y fue objeto de investigaciones periodísticas que derivaron en un Pulitzer. Llegó desde Italia en plena guerra y fue el engranaje clave para legalizar la prostitución en Nevada. Un guardia de su burdel mató a Ringo y él terminó viviendo una vida de lujos en Río de Janeiro perseguido por el FBI