Francisco Muñiz, el hombre que arrojó un arma en la Casa Rosada después de pedir ver al presidente Mauricio Macri, aseguró hoy que no quiso provocar temor y justificó su accionar en los problemas familiares que tiene y por los cuales pedía una reunión con el jefe del Ejecutivo.
Según indicaron fuentes judiciales, Muñiz explicó en su indagatoria que no había querido intimidar al presidente, pero se negó a responder preguntas. Se trató de una audiencia muy breve en donde no hubo detalles sobre las armas en su casa o los regalos que ya le había enviado al presidente. La defensa pidió su excarcelación, que será resuelta mañana. Mientras tanto, el juzgado dispuso una pericia psicológica para esclarecer si comprendía la criminalidad de los hechos por los que fue sometido.
Armas de diferentes tamaños y calibres fueron encontradas durante el allanamiento al domicilio de Francisco Ariel Muñiz, el joven que el lunes intentó ingresar a la Casa Rosada y lanzó un revólver dentro de un patio interno de la misma.
Durante la madrugada de este martes, efectivos de la Policía Federal Argentina allanaron el domicilio del joven de 36 años en la ciudad bonaerense de General Pinto, en la calle Mitre 1012. En realidad se trataba de un pequeño hotel familiar. Allí, Muñiz alquilaba una habitación junto a su madre.
También se realizó el mismo procedimiento en una pizzería llamada "La Vieja Salsa", donde el joven de 36 años trabajaba.
Mientras en el local comercial no se encontró ningún material de importancia, en la habitación de la calle Mitre sí se pudo corroborar que el detenido era un ferviente aficionado a las armas.
Efectivos de la Policía Federal incautaron 50 municiones calibre .44, las cuales se cree que pudo haber utilizado con el revólver Magnum .44 Taurus que se encontraba dentro del maletín arrojado a la Casa Rosada.
También se secuestraron 16 municiones calibre .45, un cinturón para cargarlas, una escopeta calibre .20, cinco municiones calibre 12.70 y nada menos que 175 municiones de una escopeta .22 larga.
En las próximas horas, los investigadores buscaban definir si Muñiz era un legítimo usuario de armas, ya que el revólver encontrado en la Casa Rosada tenía su número de serie limado.
Otro de los puntos por analizar por parte de los investigadores es si Muñiz se encuentra sano desde el punto de vista psiquiátrico. Se intentará determinar si actuaba dentro de sus cabales cuando se presentó el lunes por la mañana frente a una de las rejas de la Casa Rosada, en Balcarce 78, y al ser rechazado arrojó una caja de taladro eléctrico con un arma de gran porte dentro.
La causa quedó en manos del juez Ariel Lijo, quien subroga en la oficina del Juzgado Federal Nº 11 de Claudio Bonadio. Además, interviene en la causa el fiscal Gerardo Pollicita.
Se esperaba que Muñiz brindara hoy, en el transcurso del mediodía, su declaración indagatoria, para tratar de determinar cuáles fueron los motivos de su irrupción violenta en la Casa de Gobierno.
Aún se desconocen los motivos del intento de ataque a la Casa Rosada. Lo cierto es que Muñiz ya había solicitado en reiteradas ocasiones audiencias con el presidente Mauricio Macri a lo largo del 2018. De hecho, durante el mismo año había enviado un hacha a la Casa de Gobierno, en una suerte de obsequio amenazante.
A lo largo de los últimos años, Muñiz se había convertido en militante del PRO en General Pinto. De hecho, su participación era tal que llegó a crear el perfil de Facebook "PRO General Pinto". En 2017 intentó presentarse como candidato a consejero escolar suplente en su ciudad, pero fue quitado de la lista por los referentes del espacio a último momento.
Así y todo, hasta el día de su detención, Muñiz se mantuvo muy activo en las redes sociales con publicaciones de apoyo a la gestión del actual Gobierno.
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