La ex presidente Cristina Kirchner presentó tres escritos en su visita al juzgado de Claudio Bonadio, el juez que la investiga como jefa de una asociación ilícita que recaudaba coimas de los empresarios de la construcción, en donde negó la acusación, dijo que es perseguida y atribuyó el caso a la caída de imagen del Gobierno.
Una vez finalizada la presentación, en donde estuvo acompañada por los dirigentes cercanos al papa Francisco Juan Grabois y Eduardo Valdés, la ex mandataria se dirigió al Instituto Patria, desde donde se refirió de manera irónica a la cotización del dólar.
"Me dicen que está 30,50 y que Bloomberg informó que, después de Turquía, Argentina es el mercado emergente más vulnerable por balance de cuenta corriente, deuda externa e inflación. ¡¡Uhh!! Van seguir con el circo judicial y los movileros atrás mío", señaló Cristina Kirchner a través de las redes.
En las últimas horas, el mercado cambiario local arrancó con alza de 68 centavos, a $30,48 para la venta minorista y $28,94 mayorista, después de haber acumulado un alza de 6,3% en las tres ruedas anteriores. En la plaza financiera argentina cunde el temor a un efecto contagio de la devaluación emergente que sea más profundo que en el resto.
Como parte de su estrategia judicial, Cristina Kirchner pidió la nulidad del caso y recusó al fiscal Carlos Stornelli y al juez Claudio Bonadio. La presentación principal, que lleva su firma, niega la acusación, repasa –según considera ella– una persecución judicial desde la asunción de Mauricio Macri, e ironiza sobre los alcances de la denuncia surgida a partir de los cuadernos del chofer Oscar Centeno.
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