La protagonista de un escandaloso video viral, involucrada en el caso Lebbos

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La Gaceta

La declaración de una empleada doméstica abrió una nueva línea de investigación por el crimen de Paulina Lebbos, quizás el caso más resonante de los últimos años en la provincia norteña y que siempre se lo vinculó a los hijos del poder político local. "Jamás me hubiera imaginado que después de tanto tiempo surja un dato tan trascendental", evaluó el fiscal López Ávila tras escuchar el testimonio. El padre de la víctima también se mostró esperanzado.

La mujer se llama Magdalena Cruz y tiene 39 años. Fue citada a declarar en el juicio oral por el crimen de Paulina ya que una línea a su nombre aparecía en un cruce de comunicaciones entre los teléfonos de varios protagonistas del caso, como el padre del único imputado por el asesinato, Roberto Luis Gómez, y Walter "Chichilo" Acevedo, uno de los jefes de la barra de Atlético Tucumán.

Según informó La Gaceta, Cruz declaró que su empleadora había sacado una línea y un teléfono con su DNI. ¿Quién era esa mujer? Macarena Bordato, quien no había aparecido hasta ahora en la causa, pero cuyo nombre había tenido sus quince minutos de fama luego de que se viralizara un escándalo que protagonizó en el aeropuerto de Tucumán y por el cual la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) le prohibió viajar en aquella ocasión.

Tras la publicación del video en septiembre de 2016, trascendió que Bordato tenía denuncias previas por estafas, defraudaciones reiteradas y amenazas. Ahora la testigo agregó que también estuvo involucrada en temas de narcotráfico. "No recuerdo el año, también tuve problemas con un celular que estaba involucrado en un tema de drogas, mucho antes de este caso", recordó.

Magdalena Cruz relató, además, que le había contado a Bordato que la habían citado a declarar. "Le llevé la notificación y ella me acompañó a un abogado para que me explique. No llego a entender, siempre pensé que era porque yo compraba teléfonos usados, porque son más baratos", explicó.

El fiscal pidió una gran cantidad de medidas de pruebas tras la declaración de Cruz, mientras que Alberto Lebbos, padre de Paulina, evaluó: "Tengo fe de que estamos a punto de encontrar la punta del ovillo de esta trama. Indudablemente, se va confirmado la participación criminal de gente que no anda en buenas cosas".

El caso

El 26 de febrero de 2006, Paulina, de 21 años, salió de un boliche de la zona conocida como el ex Abasto, en la capital tucumana, adonde había ido a bailar con su amiga Virginia Mercado.

Según determinaron los pesquisas, alrededor de las 6.30 de ese día, ambas jóvenes se subieron a un remis bordó y mientras Virginia descendió primero en su domicilio de La Rioja al 400, Paulina siguió viaje hasta la casa de su novio César Soto, aunque nunca llegó a destino. Recién 13 días después de desaparecer, la joven fue encontrada asesinada al costado de la ruta provincial 341, a la altura de Tapia, a unos 30 kilómetros de la capital tucumana.

En el banquillos de los acusados están el ex jefe de Policía de Tucumán, Hugo Raúl Sánchez; el ex subjefe Nicolás Barrera; el ex subjefe de la Regional Norte, Héctor Rubén Brito; y el ex secretario de Seguridad, Eduardo Di Lella. Todos ellos, más el ex policía Hugo Waldino Rodríguez, están imputados del encubrimiento, mientras que al sexto procesado, Roberto Luis Gómez, se lo juzga por la "privación ilegal de la libertad" y el "homicidio" de la joven.

Se estima que el debate se extenderá durante todo 2018 y que declararán unos 200 testigos, entre ellos el ex gobernador tucumano José Alperovich, según la medida dispuesta ante un pedido de la querella, encabezada por Alberto Lebbos.