Fernando Pérez Soto
León, 11 ago (EFE).- El campeón de España y Europa de acuatlón, Kevin Tarek Viñuela, quiere "cerrar el círculo", según ha declarado en una entrevista con EFE, y lograr su primer título mundialista en esta especialidad después de conquistar dos subcampeonatos, para tomar el relevo de Cristian Fernández, que se impuso en Ibiza en la edición de 2023.
"No es una obsesión, pero está claro que intentaré demostrar que llego al mundial en el mejor momento para lograr el título", señaló el triatleta leonés que fue séptimo el pasado año, pero que ha demostrado su supremacía en esta modalidad, en la que ocupa el primer lugar y, por tanto, parte a priori con el favoritismo que él se encarga de reducir al máximo "porque la igualdad es tremenda y siempre aparecen rivales inesperados".
Viñuela será el único representante español el próximo 23 de agosto en el mundial de Townsville (Australia), tras la lesión de Cristian Fernández y una vez que logró el tercer título en acuatlón en Almazán (Soria) y el europeo en Coimbra (Portugal), en un campeonato donde también estarán presentes Javier Martín, que disputará el duatlón, y Antonio Benito la prueba de larga distancia.
El triatleta leonés ya logró una victoria de relevancia en esta modalidad, que compatibiliza con el Triatlón Cross, donde también es campeón nacional y el triatlón olímpico, cuando se impuso en la prueba de acuatlón de los Beach Games -Juegos de Playa- en la edición de 2019 que se disputó en Doha y en la que se impuso a los mejores especialistas mundiales.
La incidencia del largo viaje
La mayor preocupación para el triatleta de Vegacervera (León) es el largo desplazamiento que tendrá que afrontar para disputar el campeonato del mundo, con 30 horas de viaje, diferentes transbordos en una situación inédita para el deportista hasta ahora y de la que desconoce cuál puede ser la incidencia para la carrera posterior.
"Aún no sé como voy a responder en un viaje de estas características, en el que pueden producirse diferentes circunstancias y esa parte de desconocimiento es la que más me preocupa, junto a disputar una prueba en una zona del mundo tan alejada y donde nunca he competido", recalcó.
A pesar de este factor incontrolable, Viñuela considera que ha realizado la preparación adecuada para la cita mundialista que está intentando pulir en las semanas previas a su viaje a tierras australianas, con una adaptación, tanto a las características de la prueba, en la carrera, como en el agua, así como a la temperatura que puede encontrarse.
Una de las diferencias radica en que en este mundial se recupera el formato original del acuatlón con lo que se disputarán tres segmentos, la primera transición tras una carrera de 2,5 kilómetros, para tener que nadar 1.000 metros y concluir, de nuevo, corriendo otra distancia idéntica a la que comienza la prueba, por lo que está intentando adaptarse a lo que supone "nadar en fatiga, cuando en triatlón y otras pruebas de acuatlón, se comienza con la natación".
Sus aspiraciones son las máximas y por ello puso todo el empeño en estar en el mundial porque se ve capacitado para optar al podio e intentar dar el salto al primer cajón después de los subcampeonatos en Pontevedra y República Checa.
"Creo que puedo soñar con el oro, al menos por pelearlo, porque por las fechas del campeonato son las ideales y los resultados obtenidos hasta ahora indican que soy capaz de poderme mostrar competitivo", apunto.EFE
1010625
fps/lm/orv/og