Historias del 11 S: estos son algunos de los colombianos que murieron en el atentado terrorista en los Estados Unidos

Todo sucedió cuando 19 hombres del grupo terrorista Al Qaeda secuestraron tres aviones comerciales y los estrellaron contra las Torres Gemelas, una de las construcciones icónicas hasta ese momento en Nueva York. En ese momento, entre las múltiples victimas de este atentado, se encontraban algunos colombianos, que al igual que muchos otros huían de la violencia latente que había en su país de origen en esos años.

Hace 22 años en el atentado de las Torres Gemelas, fallecieron al rededor de tres mil personas. Entre estas, había 19 colombianos que perdieron la vida, pérdidas que para sus familiares no han sido fáciles de procesar, pues los recuerdos de aquellas personas siguen presentes en sus mentes.

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La mayoría de estos hombres y mujeres partieron a Estados Unidos con la ilusión de encontrar mejores oportunidades y mejorar su calidad de vida, sin saber lo que les esperaba. Y es que, según datos del Dane y de Cancillería, para el inicio de siglo 1.392.508 connacionales residían permanentemente en varios países extranjeros, pero en especial en Estados Unidos.

Uno de estos colombianos fue Luis Eduardo Torres. Él llegó a Nueva York a finales de los 80 con el propósito de ingresar a la bolsa de valores de Wall Street. En camino a cumplir consiguió un trabajo como corredor en Cantor Fitzgerald el 10 de septiembre de 2001. Cuando el atentado ocurrió el connacional estaba en su segundo día de trabajo.

Víctor Hugo Paz Gutiérrez, otra de las victimas del atentado, migró a la ciudad de Nueva York huyendo de la violencia de su ciudad natal, Cali, luego de que uno de sus hermanos fuera asesinado. El colombiano era chef de profesión y llegó a trabajar en uno de los restaurantes más famosos de la Gran Manzana, Windows on the World, ubicado en el piso 103 de una de las torres del World Trade Center.

Después de trabajar como técnico en la Fuerza Aérea, Wilder Alfredo Gómez decidió migrar a Estados Unidos en busca de mejor suerte. De hecho, con el tiempo aprendió el oficio de barman y trabajó junto con Víctor Hugo Paz Gutiérrez, en el restaurante Windows on the World, compartiendo también su destino.

Fueron los hermanos de Jorge Luis Morón quienes lo animaron a salir de Barranquilla, en 1993. Al poco tiempo de haber migrado consiguió trabajo como guardia de seguridad en World Trade Center. Sus parientes recuerdan que a comienzos de 2001 Morón afirmaba haberse casado con la mujer de sus sueños, Sonia Bermúdez. Cuando ocurrió el atentado estaba a punto de ser padre y de recibir la ciudadanía estadounidense.

En 1971 Sonia Ortiz dejó Colombia. Comenzó como aseadora y tras ocupar varios cargos, llegó a a operar el ascensor que comunicaba el lobby con el restaurante Windows on the World. Gracias a su disciplina pudo comprar una casa en Queens, en donde vivía con su hija.

Antonio Montoya se había radicado en Boston 20 años antes de los hechos del 11S, junto con su esposa y su hijo, y posteriormente nacerían sus dos hijas. La tragedia alcanzó a su familia por una confusión de reservación, que lo obligó a abordar un día después el vuelo 311 de American Airlines, con destino a Los Ángeles. Su plan era visitar a su hermana en California, a quien no veía hacía años.

Arcelia Castillo llegó muy joven a Estados Unidos, trabajaba en dos empleos al mismo tiempo para poder darles sustento a sus dos hijos. Con los años empezó a estudiar contabilidad en las noches. Araceli iba a recibir su titulo en noviembre de 2001.

Otros de los colombianos que perdieron su vida con el ataque terrorista a Estados Unidos fueron Carlos Cortés Rodríguez, Danny Correa, Milton Bustillo, Adriana, Alejandro Castaño Henao, Pedro Francisco Checho, Sharon Cristina Millán, Rafael Humberto Santos, Hernando Salas, Gloria Nieves, Carlos Mario Muñoz y César Augusto Murillo.