Miembros del ELN habrían hostigado base militar de Ricaurte en el departamento de Nariño

Los habitantes de esta zona de Nariño denunciaron que durante dos horas se escucharon detonaciones y disparos

Foto de archivo. Guerrilleros del izquierdista Ejército de Liberación Nacional (ELN) 30 de mayo, 2004. REUTERS/Albeiro Lopera

Recientemente, en el municipio de Ricaurte del departamento de Nariño, la preocupación aumenta tras un prolongado hostigamiento por parte de presuntos integrantes del ELN a una base militar y a la finca de un líder indígena de la zona.

Durante más de dos horas, estos individuos quemaron una bodega y una moto, además de retener a tres personas, entre ellas la madre de uno de los candidatos a la alcaldía.

Según relatos de los habitantes del sector, el domingo por la noche, un grupo armado llegó a una base militar y comenzó a atacar con ráfagas de fusil, lo cual generó pánico y temor entre la comunidad que celebraba el Día del Padre. Durante dos horas se escucharon detonaciones y disparos en la zona.

Mientras esto ocurría, en otro lugar del municipio, específicamente en la vereda San Pablo, otro grupo armado autodenominado como miembros del ELN, destruyó todo a su paso en la finca de un líder indígena de Ricaurte, Nariño.

En una entrevista con Blu Radio, una mujer de 75 años, quien prefirió mantener su identidad en reserva, afirmó que alrededor de las 9:00 p.m. del domingo, 18 de junio, este grupo armado llegó preguntando por el paradero del líder indígena Abel Quiñonez, quien también es candidato a la alcaldía: “Nos amenazaron con matarnos si no decíamos dónde estaba”, afirmó.

La mujer relató que estos presuntos miembros del ELN llegaron a la finca y destruyeron puertas, ventanas y otros objetos mientras buscaban al líder indígena: “Estuvimos retenidos durante una hora mientras los subversivos buscaban en todas las habitaciones de la casa y en los alrededores”.

Abel Quiñónez, en una entrevista con Blu Radio, manifestó no tener ningún problema con el ELN y no comprende por qué lo están buscando. Sin embargo, expresó temor por su vida y afirmó que no “huirá” del municipio porque confía en que las autoridades lo protegerán a él y a su familia.

Es importante recordar que en esta zona de Nariño se ha registrado un desplazamiento masivo en las últimas tres semanas. Hasta el momento, al menos 3.000 indígenas de la comunidad Awá han tenido que abandonar la zona debido a los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias.

Colombia tiene las peores cifras de secuestro de la última década

La firma del cese al fuego bilateral entre el Gobierno de Gustavo Petro y el ELN generó polémica, ya que en el acuerdo se estableció que el grupo guerrillero solo iba a parar las acciones militares contra la Fuerza Pública y la población civil; sin embargo, los subversivos dejaron claro que seguirán secuestrando y extorsionando porque esas son sus fuentes de financiación.

Frente a lo anterior, salió a colación un informe del sistema de información de la Policía, que evidencia las cifras de secuestrados entre el 1° de enero y el 31 de mayo del 2023. Según las autoridades, en ese periodo en el que raptaron a 152 personas en los departamentos de Antioquia, Arauca, Atlántico, Bolívar, Boyacá, Caquetá, Casanare, Cauca, Cesar, Chocó, Cundinamarca, La Guajira, Meta, Nariño, Norte de Santander, Putumayo, Santander, Valle y Risaralda.

Las cifras reflejan reportes de secuestros en 19 de los 32 departamentos del país, evidenciando así la gran presencia criminal de los grupos armados ilegales en Colombia, como las disidencias de las Farc, el ELN y el clan del Golfo, principalmente con las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), pese a los procesos de paz que adelanta el presidente Gustavo Petro en la búsqueda de la denominada ‘paz total’.

Partiendo de los informes entregados por la Policía en 2021 y 2022, las cifras de secuestros en lo corrido del año son alarmantes, pues el año pasado hubo un total de 203 raptos en el país, 51 casos más de los que van en el transcurso del 2023.

Entre tanto, en el 2021 se presentaron 160 secuestros en todo el país, es decir, ocho retenciones ilegales más que las que se registraron en solo cinco meses del año en curso, evidenciando así un aumento exponencial de este delito en todo el territorio nacional.

Para encontrar un registro similar al de este año en materia de secuestros, hay que remontarse al 2012 cuando se presentaron 305 raptos en todo el año, de acuerdo con las cifras emitidas por la fundación País Libre. De las detenciones ilegales del 2012, 146 fueron en los primeros cinco meses del año, según Revista Semana, mostrando incluso un promedio inferior al de este año; hay que recordar que para ese entonces las Farc aún no se desmovilizaban y aún quedaban reductos de grupos como el Epl, autodefensas y demás.