Muy lejos del “oríllese a la orilla”: así estudian los futuros policías de CDMX

Despertar a las 4:00 a.m., clases de gimnasia, natación, box y hasta jiu-jitsu: así se preparan los cadetes de la Universidad de la Policía de la Ciudad de México

Compartir
Compartir articulo
Universidad de la Policía de la CDMx

El día de un estudiante de policía en la Ciudad de México comienza a las 4:00 de la mañana. A esa hora los cadetes deben levantarse rápidamente y dirigirse a hacer “orden cerrado”, actividad que consiste en marchar durante casi dos horas. Luego, los cadetes realizan actividades de acondicionamiento físico para posteriormente meterse a las aulas, regresar al “orden cerrado”, descansar y finalmente dormir a las 9:00 p.m.

Andrea Lira, de 28 años, desde niña soñó con ser policía; sin embargo, el camino la llevó a estudiar una carrera en psicología y ejercerla por algún tiempo, dejando en el olvido aquel anhelo de su infancia. Fue una visita a la Universidad de la Policía de la Ciudad de México (Unipol) lo que la empujó a revivirlo.

“Desde pequeña ya tenía esta idea de querer ser policía y conforme fueron pasando los años, me fui acercando más al objetivo hasta lograrlo”. En medio de la emergencia sanitaria por COVID-19 la Unipol fungió como sede de vacunación; le tocó acudir como aplicadora, reencontrándose con sus sueños: “El destino me está diciendo algo”, confesó en sus recuerdos.

Investigó los requisitos, las convocatorias y en abril del 2022 se enlistó para entrenar al interior de la organización.

La Universidad de la Policía cuenta con un bachillerato técnico, varias licenciaturas y posgrados (Foto: Infobae)
La Universidad de la Policía cuenta con un bachillerato técnico, varias licenciaturas y posgrados (Foto: Infobae)

Por su parte, Giovanni -de 27 años- actualmente se encuentra concluyendo una licenciatura en Pedagogía en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al tiempo que está por egresar del Curso Básico de Formación Policial. Él también creció con la idea de dedicarse a la seguridad; desde niño quería ser un activo de la organización, portar el uniforme azul y patrullar las calles de la ciudad.

De eta forma, reveló que planea involucrar su licenciatura con el sector policiaco: “A los 12, 13 años, cuando empiezas a preguntarte y te preguntan en la escuela ‘¿Qué quieres ser de grande? bombero, policía, maestro’ y a mí me gusta la decencia y si lo involucro con la policía creo que puede ser algo bueno”.

¿Cómo es la vida de un estudiante de policía?

Giovanni confesó que la vida de cadete es muy interesante, aunque a veces es un poco cansada por el desgaste que tienen, “pero cuando terminas el día te das cuenta de todos los resultados que obtuviste desde la mañana”, aclaró.

Te paras a las 4:00 de la mañana, te vas a desayunar, haces tus actividades, te formas, cantas el himno”: así son los primeros momentos del día de un cadete. Para el joven de 27 años que describió sus actividades a Infobae México, cantar el himno nacional es algo de lo que más le llena en su jornada.

El boxeo está dentro de la preparación del cadete de policía (Foto: Infobae)
El boxeo está dentro de la preparación del cadete de policía (Foto: Infobae)

Posteriormente los cadetes hacen orden cerrado, que “es marchar, paso redoblado, cosas aquí que nos ayudan a tener una mejor postura”, contó. Luego cumplen con una serie de actividades enfocadas a la resistencia anaeróbica, como natación, gimnasia, crossfit. “Nos ayudan a desempeñarnos mejor en el actuar policial”, dijo el cadete que está próximo a egresar.

Los estudiantes del curso básico de policía realizan tres comidas al día, una al despertar, otra alrededor de la 1 de la tarde -después de la activación física y previo a las clases teóricas- y la última por la noche. De acuerdo con José Luis Tinoco, docente del área de Acondicionamiento físico, los estudiantes reciben una dieta especial determinada por el grupo de nutriólogos de la institución.

“Tomando en cuenta las actividades que se realizan es la porción indicada para cada estudiante; no se puede generalizar, hay diferentes complexiones y contraindicaciones médicas (...) La porción que se les da es la adecuada para el desgaste físico”.

Los sábados son los únicos días libres que los estudiantes pueden tener (si no son encarcelados, confesaron entre risas); al mediodía pueden salir a ver a sus familias y amigos, para regresar esa misma noche y continuar sus actividades al día siguiente, comenzando una nueva semana.

Cada día los estudiantes se someten a tres horas diarias de clases teóricas (Foto: Infobae)
Cada día los estudiantes se someten a tres horas diarias de clases teóricas (Foto: Infobae)

Cursos, materias y prácticas para ser policía

El curso básico de formación inicial dura seis meses; si es un curso con formación de perfil especializado, sea penitenciario, de investigación o preventivo, se extiende dos meses más.

Durante este tiempo, el cadete debe ser internado en las instalaciones de la Unipol, cursar y acreditar todas las materias, así como cumplir con el reglamento. Además de la activación física, se cuenta con clases prácticas como Patrullaje, en donde aprenden a manejar las unidades de transporte.

También se brinda la clase de Detección y Detención, en la cual se les enseñan técnicas de sometimiento y formas de actuación frente a situaciones de peligro. Y por último, cuentan con clase de Armamento y Tiro, donde -como su nombre lo dice- aprenden el uso de armas de fuego.

Por su parte, dentro de las actividades físicas, los cadetes reciben clases de boxeo, así como de Jiu-jitsu brasileño, de donde han emergido deportistas profesionales como Alberto El Alacrán Ruiz, elemento activo de la policía capitalina y boxeador profesional.

Con respecto a las clases teóricas, las y los cadetes cursan una serie de materias enfocadas en los conocimientos que deben manejar, relacionados a la actividad policial en campo. Andrea mencionó que algunas de sus favoritas son Perspectiva de género, Atención a víctimas de delito, Juicios orales y Detención y conducción de personas.

La preparación del cadete consta de varias horas bajo el sol, aprendiendo técnicas del actuar policial (Foto: Infobae)
La preparación del cadete consta de varias horas bajo el sol, aprendiendo técnicas del actuar policial (Foto: Infobae)

Para Gio, su materia preferida fue Primer respondiente, pues ésta “involucra temas donde podemos saber cómo debemos actuar ante cualquier situación que se presente, cómo vamos a ayudar a las personas, cómo se va a solventar una situación de peligro”.

El estigma de ser policía

Tanto estudiantes como docentes y policías activos están conscientes sobre el prejuicio que ronda su profesión; algunos reconocen que los mismos cuerpos de seguridad se han ganado las etiquetas a lo largo de los años, pero -también- apuntaron que la actual policía es diferente.

Andrea sabe que la opinión de la gente fuera de la corporación está muy cargada de prejuicios. No obstante, una vez dentro se ve de otra manera. “Hay un estigma social para la policía, pero al formar parte de la institución nos damos cuenta de que es realmente diferente y que tiene muchas áreas de oportunidad, tanto para crecimiento profesional como para crecimiento personal”.

Tenemos una percepción diferente afuera, y me incluyo. A veces como civil vemos cosas así, ‘oríllese a la orilla’ o situaciones que nos dicen de la policía. Pero estando adentro vemos leyes que regulan todo esto, no es algo fácil. Muy pocos tienen el carácter y las ganas de poder desempeñarlo bien”, se sinceró Giovanni.

Con respecto al estigma sobre las mujeres policías, Andrea considera que su experiencia dentro de la Unipol ha sido muy grata, “a veces una piensa que por el hecho de ser mujer vas a rendir menos, pero al estar dentro de esta institución nos damos cuenta de que una mujer tiene, no solo la fuerza mental, sino la fuerza física, aparte de que aquí utilizamos ambas”.

Las y los docentes de la Unipol son policías retirados o activos (Foto: Infobae)
Las y los docentes de la Unipol son policías retirados o activos (Foto: Infobae)
“Me he dado cuenta de que puedo dar incluso más de lo que pensé que podía dar”.

Sobre el futuro, muestran su entusiasmo y seguridad frente a la oportunidad de poner en práctica lo que ahora han aprendido. “Me emociona mucho el saber que voy a portar un uniforme que desde niña quise portar, y el hecho de seguir preparándome, de que la policía ya no es una policía como antes. Se busca ser un policía preparado, con conocimientos, no solamente prácticos, sino teóricos”.

“Anteriormente había poca policía preparada y lo vemos. Ahora tenemos compañeros -y me siento muy orgulloso de decirlo- que tienen licenciatura, maestría, es una policía mejor preparada y que va a cambiar en algún momento por completo todo lo malo que existía algún tiempo atrás”, expresó Gio.

“Estoy seguro de que vamos a ser una mejor policía”.

SEGUIR LEYENDO: