El pasado 14 de noviembre, la Cámara de Diputados aprobó el recorte de 4 mil 913 millones de pesos al presupuesto solicitado por el Instituto Nacional Electoral (INE), por lo que el siguiente año la institución operará con un total de 19 mil 736 millones de pesos, con los que deberá hacer frente a dos procesos electorales.
Además de las elecciones locales programadas para 2022, el INE tendrá que efectuar una nueva consulta popular, la correspondiente a la revocación de mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien incluyó esta promesa durante su campaña electoral en 2018 para incluir a la ciudadanía en temas de trascendencia nacional.
La primera consulta aprobada y difundida por el INE ocurrió a mediados de 2021, cuando se preguntó a la población sobre el enjuiciamiento hacia actores políticos del pasado y donde no se alcanzó el 40% necesario de la lista nominal para que la votación fuera válida; sin embargo, en esta ocasión el nombre que estará en juego es el del titular del Ejecutivo Federal.
Debido a que la pregunta en cuestión girará en torno a la permanencia de López Obrador hasta el final de su sexenio, se trata de un proceso electoral sin precedentes que solo se podría equiparar con unas elecciones presidenciales en cuestión de presupuesto.
El costo por organizar las últimas elecciones federales en 2018 ascendió a 28 mil 33 millones de pesos, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación; sin embargo, esta suma se dividió en tres organismos: 3 mil 893 millones de pesos hacia el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), 6 mil 702 millones hacia partidos políticos y finalmente 17 mil 426 millones de pesos al Instituto Nacional Electoral (INE).
Este monto de más de 28 mil millones de pesos fue para elegir a un nuevo presidente, 500 diputados y 128 senadores, por lo que la diferencia para organizar una consulta popular alrededor de un solo personaje deberá ser menor.
De acuerdo con el presidente consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, la consulta popular para la revocación de mandato tenía un presupuesto asignado de 5 mil 743 millones de pesos, de acuerdo con el primer monto global solicitado ante la Cámara de Diputados.
Esto representa una diferencia de 11 mil 630 millones de pesos respecto a la elección federal de 2018, pero 4 mil 244 millones de pesos más que la última consulta realizada para enjuiciar a actores políticos del pasado, de acuerdo con la página oficial del INE.
El presupuesto total del INE para 2022 asciende a 19 mil 736 millones de pesos, de los cuales se deberán repartir a financiamiento para partidos políticos, presupuesto base y cartera institucional de proyectos y la consulta popular para revocación de mandato, de acuerdo con Córdova.
El último ajuste señaló un gasto previsto de 3 mil 830 millones de pesos para la revocación de mandato, una fracción del total asignado para 2022, que se deberá compartir con elecciones en seis estados, además de la expedición y renovación de credenciales de elector, financiación de partidos y campañas electorales.
Debido al último recorte presupuestal aprobado por la Cámara de Diputados, el consejero electoral del INE, Jaime Rivera, afirmó que “es un monto superior a lo que el INE estimó necesario para la revocación (de mandato); el INE no dispone de los recursos para ese ejercicio, no hay forma de hacerlo sin recursos especiales”, por lo que dejó entrever la imposibilidad de realizar este proceso.
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