Imputan a siete policías por torturas a un menor militante de los derechos gay

En tanto, la auditoria General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense resolvió separar preventivamente de la fuerza tanto a los siete imputados como a otro policía que estaba de guardia en la misma repartición.

El denunciante es el adolescente Lautaro Blengio, militante de derechos humanos, y presidente del Centro de Estudiantes de la Escuela Media número 1 Rodolfo Walsh de la localidad.

Según denunció, algunos efectivos lo hostigan desde diciembre pasado, lo acosan con insultos y lo paran sin razón.

"Esto es discriminación", contó el padre del joven, Daniel Blengio, quien relató que el lunes pasado a la mañana, cuando el chico volvía del colegio, fue torturado por un policía y tirado en el vivero de Miramar.

"Ayer

l

precisó el hombre.

Luego de los primeros problemas con la Policía durante el verano, la familia del chico presentó ante la Justicia de Paz de Miramar un habeas corpus preventivo, pero la jueza Florencia Hogan, esposa del intendente de Miramar, Germán Di Cesare, se lo negó argumentando que no corría peligro su integridad física.

"Pedimos un recurso de amparo preventivo para evitar que le pase algo más grave y la jueza Hogan rechazó el pedido diciendo que no estaba en peligro. Entonces nos fuimos a la Justicia de Mar del Plata, donde iniciaron una investigación en la comisaría", explicó Blengio.

"El domingo, en un nuevo procedimiento policial, a mi hijo lo agredieron con violencia y él la rechazó porque dice que tiene derechos y cuando intentó tomarle una foto le sacaron el celular", relató el hombre. Tras esto, reveló que "un policía le dijo que le iban a desfigurar la cara en el vivero".

Luego de esta amenaza, el padre indicó que "el lunes cuando él volvía de la escuela, a las 8 de la mañana, por los festejos del primer día del último año escolar, fue interceptado por un coche particular del que bajó un efectivo de civil y lo metió en el auto. Mi hijo reconoció que era el mismo que lo había amenazado el día anterior", agregó.

Precisó que "lo llevaron apuntando con un arma y en el interior del viaje lo fueron cortando con una cortapluma. Lo llevaron al vivero y le sacaron la capucha, donde hicieron unas cruces en el cuerpo y le dijeron que en esas cruces lo iban a fusilar".

Cuando el joven fue llevado al vivero "lo golpearon, y le dijeron que así como él tenía sus derechos, ellos también los tenían y lo dejaron tirado en el vivero inconsciente hasta que pudo llegar a casa". En ese auto, subrayó que "había un solo policía de civil y uno que manejaba el auto particular". Por último, contó que su hijo "está muy golpeado y shockeado, con marcas en el cuerpo".

La fiscal que investiga el caso, Ana Caro, explicó que se le dio curso a la denuncia y se inició una instrucción por "apremios ilegales" en la que está acusado personal policial.