La inspiradora historia de una estrella de Broadway que lucha contra el cáncer

Ensayar una obra de teatro de Broadway es estresante para cualquier actor, hay muchas horas de trabajo y cambios de último momento. Es difícil imaginar hacer eso al mismo tiempo que se recibe radiación contra el cáncer.

Así se encontraba Krysta Rodríguez hace unos meses mientras se preparaba para el regreso de Spring Awakening y luchaba contra el cáncer de mama.

Pero la estrella de 31 años de la serie de televisión Smash y La familia Addams de Broadway se siente incómoda si alguien la califica como una inspiración.

"No estoy tratando de hacer algo que no haría cualquier otra persona. Si tienes cáncer, tratas de curar el cáncer, no conozco a ninguna mujer, al menos de mi edad, que diría 'bueno, creo que me atrapó''', apuntó. "Eso no es nuestra naturaleza, así que no siento que merezca ningún reconocimiento por eso".

La nueva producción de Spring Awakening regresa a Rodríguez a un terreno conocido, pues formó parte del elenco de la obra en 2006 en Broadway como actriz de reparto y sustituta. En esta ocasión interpretaba a Ilse, una chica sin límites que escapa de casa.

Rodríguez era el reemplazo para ese papel en 2006 y le encantó. En esta ocasión el montaje de Deaf West Theatre incluye algunos actores sordos y es presentada simultáneamente en inglés y lenguaje de señas estadounidense.

Michael Arden, director y amigo de la actriz desde que estaban en un taller de La familia Addams, dijo que él y el elenco se sorprenden cada día por el ejemplo de Rodríguez.

"Es una trabajadora tan comprometida y fue la primera en meterse de lleno en esto", dijo. "Es una lección para todos, a veces puedes elegir dejarte llevar y gobernar por las penas. Pero a veces se pueden usar como una herramienta".

Rodríguez, originaria de California, actuó en el musical de Francis Ford Coppola Gidget en 2000 y en el programa de televisión Colby's Clubhouse. Entre sus otros créditos en Broadway se destacan A Chorus Line, In the Heights y First Date.

Hace un año supo que tenía un tumor de 8 centímetros en un pecho. Su salud y juventud hicieron que en un principio los médicos descartaran que tuviera cáncer: "El hecho de que no se detectara antes fue simplemente porque nadie pensó que podría pasar".

Aunque las mamografías no son recomendadas para mujeres menores de 40 años, escuchó una segunda opinión, algo que pide a las mujeres jóvenes que creen que algo no está bien.

Al comienzo sólo le contó a sus familiares y amigos. Filmó la película My Bakery in Brooklyn y dirigió A Chorus Line en su secundaria.

"Cuando empiezas a ser actor te dicen 'hay cientos de personas formadas esperando para reemplazarte' así que nunca quieres enfermarte. Nunca quieres dar menos que lo mejor. Tienes esa idea de que 'si le cuento a la gente esto no van a querer contratarme. Soy un lastre'''.

No hubo manera de ocultar cuando su característico cabello corto comenzó a caer por la quimioterapia. Pero seguía trabajando, incluso consiguió un papel en Chasing Life, de ABC, en el que interpretó a un personaje con cáncer.

Reconoce a sus padres y a su novio por soportar la carga de su estrés. "Me siento un poco avergonzada cuando la gente dice que yo los inspiré. Digo 'por Dios, necesito saber manejar esto mejor''', dijo.

El desarrollo de Spring Awakening ha sido similar a la batalla de Rodríguez contra la enfermedad. Comenzó sus ensayos en Los Ángeles el último día de su tratamiento de quimioterapia y terminó las funciones el día antes de que le realizaran una doble mastectomía. (En el musical se quitó la peluca para revelar su cabeza calva).

La actriz, que se confiesa una adicta al trabajo, comenzó el blog ChemoCouture para compartir secretos de belleza y consejos para otros pacientes con cáncer, con entradas como "8 cosas que no se deben decir a alguien que tiene cáncer" y "¿Tienes miedo?" o "Natalie Portman se veía hermosa con la cabeza rapada". Su habilidad para escribir y su humor llevó a que la revista Cosmo se interesara.

Rodríguez se recuperaba de la cirugía cuando escuchó que la obra se mudaría a Broadway. (Sus cicatrices fueron incorporadas en la versión de Nueva York). La primera función de preestreno en Nueva York coincidió con su último tratamiento de radiación y celebró yendo a Wizarding World of Harry Potter con su novio.

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"Lo que he aprendido es que todo es menos horrible de lo que piensas que será. Ves esta cosa y piensas 'esto será terrible', pero entras en eso y lo superas", dijo.

"La vida sigue a tu alrededor, sigues saliendo a cenar con tus amigos, cuando puedes. Sigues trabajando, si puedes. Haces lo que necesitas hacer y eso es todo".

El cáncer no ha menguado la inteligencia o el espíritu de Rodríguez. Aunque siente dolor por los expansores que tiene en sus pechos, se rasca la cabeza, ahora con un pelo corto como el de Mia Farrow, y piensa en las posibilidades infinitas que tendrá su pelo.

"Creo que me voy a alocar. Tengo una oportunidad rara. La mayoría de las mujeres no se ofrecerían a tener su cabello con este estilo", apuntó. "Definitivamente me siento más libre".