El discurso de Mauricio Macri sufrió un fuerte giro en las últimas horas. En una entrevista con Jorge Lanata en Radio Mitre prometió que mantendrá la gestión estatal de YPF y de las AFJP y continuará con la Asignación Universal por Hijo, todos pilares de la política kirchnerista.
Años atrás Macri había sido uno de los candidatos que prometían volver a privatizar Aerolíneas Argentinas en caso de llegar a Casa Rosada. Si bien no habló de sus planes para la compañía aérea, confirmó que no habrá marcha atrás en medidas sensibles que fueron adoptadas por el gobierno de Cristina Kirchner.
"No sólo vamos a mantener la Asignación Universal por Hijo, sino que les vamos a dar educación (a los chicos) para que tengan un futuro, tengan trabajo propio y se puedan desarrollar a partir de un gobierno que recupere el valor de la educación pública", declaró el precandidato a presidente del PRO.
Con estas declaraciones, el jefe de Gobierno cruzó a otro postulante a la Presidencia, Daniel Scioli, que esta mañana planteó que los candidatos opositores pretenden derogar el beneficio social que impulsó el actual Poder Ejecutivo para los menores de 18 años cuyos padres están fuera del sistema formal de trabajo.
Esta semana la polémica se inició con declaraciones del militante kirchnerista Alex Freyre, que fue mucho más allá que Scioli y planteó que con la oposición los enfermos de HIV podrían morir porque van a faltar medicamentos. Estos dichos fueron cuestionados por toda la dirigencia política, incluso desde el propio kirchnerismo.
Macri, en un perfil más kirchnerista que de costumbre, dijo que YPF continuará bajo conducción estatal y que no impulsará la privatización del sistema de jubilaciones porque "el daño ya está hecho". Ahora su política apuntará a generar energía barata y aumentar los fondos previsionales.
El líder del PRO prometió que va a "echar a los buitres" con un acuerdo con los fondos de inversión que no entraron en los canjes de deuda. Sin embargo, cuando le consultaron cuál es su plan, dudó: "Yo no estoy sentado ahí, no me pueden preguntar cómo voy a hacer. Lo veré cuando llegue el momento. Yo creo que van a arreglar en enero".
Las expectativas del mercado están puestas en una negociación entre el Gobierno y los holdouts a partir del año que viene, luego de que venza la cláusula RUFO. Esta condición le prohíbe al Ejecutivo cerrar un entendimiento en mejores condiciones que las pautadas en los procesos de reestructuración de 2005 y 2010.