El empresario Juan Alberto Paladini falleció el sábado pasado tras perder el control de su vehículo mientras transitaba por el camino que une Rosario con Córdoba: el auto mordió la banquina, se desestabilizó, dio dos tumbos y cayó en un zanjón.
Lo que inicialmente fue visto como un accidente vial, horas después empezó a perfilarse como un posible caso policial, debido a que la modelo Rocío Guirao Díaz (esposa del hijo del fallecido) aseguró que su suegro "fue una de las tantas víctimas de inseguridad" que hay en la Argentina debido a que el siniestro se produjo porque la víctima recibió un "ladrillazo" en el parabrisas de su automóvil.
Para fundamentar su denuncia, la mujer publicó fotos de los daños que presentaba el automóvil en el que se mató Paladini: en una de ellas se veía un gran impacto sobre el vidrio, del lado del conductor.
Sin embargo, esto contrasta con las imágenes que se vieron del vehículo minutos después del hecho, por lo que la fiscal Mariana Prunotto, que interviene en la investigación, dispuso que hoy se practiquen nuevas pericias y comparaciones fotográficas. Se estima que los resultados se conocerán esta tarde.
El fiscal Regional, Jorge Baclini, señaló que "tanto la fiscal Prunotto, que estuvo en el lugar minutos después del accidente, como el personal de la Policía de Investigaciones que realizó las pericias, no advirtieron restos de ladrillo en el parabrisas ni en el interior del vehículo".
"Observamos un solo impacto en el parabrisas y no había marcas de piedrazos ni restos (de ladrillo) ni externa ni internamente, ni siquiera en el capot ni en las cercanías. Además, entiendo que, si hubieran querido robarle, lo hubieran hecho", explicó en diálogo con radio La Red.
"No podemos descartar nada, pero las fotos que tenemos en nuestro poder y el resultado de las primeras pericias que se practicaron en el lugar no arrojaron indicios que indicaran que el vehículo recibió un impacto de un ladrillo", agregó Baclini en declaraciones que difunde el diario La Capital.
Fuentes judiciales adelantaron que, según las primeras pericias, el impacto que tenía el parabrisas se había producido "del lado de adentro" y apuntaron que el empresario salió despedido del vehículo porque no usaba cinturón de seguridad, algo que fue desmentido por la familia Paladini, que aseguró que el empresario iba atado pero el cinto no funcionó correctamente.
Otro dato relevante es que -según las autoridades- en la zona donde se produjo el siniestro (unos 200 metros antes del acceso a la autopista a Córdoba por Circunvalación, en la mano que va de norte a sur) no hay ni un solo antecedente de un ataque a piedrazos contra automovilistas.