Brasil: automotriz francesa suspende personal por freno en compras desde la Argentina

Son 650 empleados de Peugeot-Citroën, de la planta de Porto Real. La cesantía es de hasta 5 meses. Por el momento la compañía no analiza despidos. Del total de la producción, el 40% se exporta al mercado argentino

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El sector automotriz en Brasil está atravesando un momento delicado. La caída de exportaciones hacia la Argentina llevó a la compañía Peugeot-Citroën a suspender a 650 empleados por cinco meses en uno de los turnos de la planta de Porto Real.

En un comunicado, la compañía explicó que la reducción en las ventas a su principal socio del Mercosur fue uno de los agravantes. De esta manera, en esa planta se pasó de producir 630 autos por día a 450, una reducción de 27,5 por ciento.

"La suspensión se hizo luego de un acuerdo con el sindicato. Dicho acuerdo prevé un período de dos a cinco meses", explicó Eduardo Chaves, director de producción en la fábrica.

Durante la suspensión, los empleados recibirán el seguro de desempleo que paga el Ministerio de Trabajo, mientras que la empresa se comprometió a completar el monto y que no haya reducción de salario. El acuerdo también establece que los empleados realizan cursos de formación y capacitación.

Aunque no se habla directamente de despidos, la central obrera Fuerza Sindical está en alerta. Desde el gremio indicaron que este es el primer caso pero que en breve otras automotrices podrán seguir esa metodología.

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El grupo francés reconoció también que los despidos temporarios se deben a un freno en las ventas en el mercado interno brasileño. Durante enero, ese descenso se ubicó en torno al 2,5 por ciento.

Actualmente, la planta de Porto Real produce el Peugeot 208, el 207, y los modelos Citroën C3 Aircross y C3 Picasso, entre otros. Del total de la producción de las marcas francesas, el 40% se exporta y casi en su totalidad, a la Argentina.

La devaluación y el anuncio de una reducción del 27% en las importaciones de vehículos están golpeando fuerte en Brasil y los empresarios del sector advierten sobre el impacto. Jaime Ardila, presidente de General Motors en Brasil y para el Mercosur, agregó que deberá reducir sus ventas a la Argentina entre "50.000 y 70.000 unidades" durante 2014.

La preocupación de los empresarios se centra en el mercado cambiario argentino, luego de una devaluación en el orden del 20% en enero. Los números hablan por sí solos, si se tienen en cuenta que la Argentina recibe el 85% de los vehículos que exporta Brasil.