La carrera hacia las elecciones presidenciales en México se intensifica, con todos los ojos puestos en el probable triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo, la candidata de Morena.
Según análisis de Citibanamex, el panorama político apunta hacia una victoria de la morenista, lo que implicaría una continuación del proyecto de la Cuarta Transformación liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, la oposición enfrenta el desafío de evitar que Morena obtenga una mayoría en el Congreso, buscando contener el efecto de arrastre del voto presidencial sobre las demás pistas electorales.
Voto dividido en tres entidades
El análisis de Citibanamex destaca que, si bien las dinámicas de intención de voto favorecen a Morena en diversos estados, en el caso como Ciudad de México, Morelos y Veracruz, existe la posibilidad de que los electores prioricen convicciones locales sobre decisiones a nivel federal, o que opten por ejercer un voto dividido.
Este escenario plantea una incertidumbre sobre el resultado final y la distribución del poder legislativo.
En este contexto, la elección presidencial se convierte en un punto de inflexión paradigmático, no solo por los perfiles de las candidatas, sino por lo que representan en términos de la continuidad o la reversión del proyecto político encabezado por López Obrador.
La oposición se presenta como la alternativa para detener y revertir este proyecto, mientras que Morena busca consolidar su agenda y darle continuidad.
Congreso para Morena
En cuanto a la conformación del Congreso, Citibanamex anticipa que el Senado podría mantenerse mayoritariamente en manos de Morena y sus aliados, aunque sin alcanzar la mayoría calificada.
Sin embargo, la distribución de la Cámara de Diputados es más incierta. En la contienda legislativa, la atención se centra en las dos grandes coaliciones: la oficialista, liderada por Morena, y la de oposición, conformada por el PAN, PRI y PRD.
Según las proyecciones, Movimiento Ciudadano (MC) podría mantener su porcentaje de votos similar al de 2021, mientras que el resto de la elección se disputará entre las dos coaliciones principales. Si estas empatan en votos para diputados, se estima que la coalición encabezada por Morena podría obtener una frágil mayoría de las curules, situándose entre el 50 y el 52%.
La lucha por el control del Congreso refleja la polarización y la competencia política en México. Mientras Morena busca consolidar su poder y continuar con su agenda de transformación, la oposición se une con el objetivo de frenar ese avance y promover una alternancia en el gobierno.
El resultado de estas elecciones tendrá un impacto significativo en el futuro político y económico del país, marcando el rumbo de las políticas y reformas en los próximos años.