El mismo clima enrarecido que cuando fue eliminado de la Copa Libertadores se vive en el Mundo Boca. Quedar afuera de la Copa Argentina a manos de Rosario Central y no jugar una competencia internacional en el 2017 golpeó duro al Xeneize, especialmente a Carlos Tevez.
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Una vez finalizado el partido, el delantero se fue prácticamente en silencio para subirse al micro. Se sentó solo para reflexionar e intentar asimilar la angustia que lo invadía. El capitán del club de La Ribera lucía abatido y se tomaba la cabeza, intentando explicarse qué fue lo que aconteció en el Mario Alberto Kempes.
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Estas imágenes dispararon los rumores con respecto a su futuro, los cuales se incrementaron con su silencio y lo acontecido en las prácticas. Al igual que en el entrenamiento de ayer, el Apache no trabajó con el grupo, se aisló en kinesiología y se marchó antes del Complejo Pedro Pompilio.
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Desde el cuerpo médico no dieron precisiones ni emitieron ningún comunicado con respecto a la salud del delantero; aunque expresaron que no sería de gravedad. Ante este escenario, es una incógnita su presencia en el partido del domingo en La Plata, ante Gimnasia.
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Vale recordar que Tevez reconoció que se replanteó su retiro luego de perder la Copa Libertadores y que este nuevo golpe le haría replantearse nuevamente su futuro. Además, varios equipos están agazapados esperando su decisión para intentar seducirlo.
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