Por qué las ventanas de los aviones tienen un agujero

Ningún elemento en el diseño de un avión es casualidad

Compartir
Compartir articulo
infobae

¿La ventana que me tocó está rota? ¿Es seguro viajar con un orificio en la ventana del avión? ¿No irá a entrar aire helado por ahí? ¿Se despresurizará la cabina por ese agujerito?

No. La respuesta a todas esas preguntas es no.

Si se observa con atención, todas las ventanas del avión tienen ese pequeño agujero… y si está allí es por algo.

(istock)
(istock)

La sección viajes de La Vanguardia explica paso a paso porque hay un pequeño orificio en cada ventana del avión:

Cada una de ella está compuesta por tres paneles separados por espacios vacíos entre sí, y están hechos de resina acrílica y sintética muy resistente. El panel externo y central son estructurales y se sellan al fuselaje del avión. El panel interno se monta sobre el revestimiento de la pared de la cabina.

infobae

Junto con el panel exterior -que es el encargado de soportar la presión externa- el panel central es el más importante, ya que, cuando el avión despega la presión del aire en cabina empieza a disminuir y, a partir de 3.000 metros no hay suficiente oxígeno para que los pasajeros respiren con normalidad, por lo que es necesario mantener la presión dentro de la cabina.

Y precisamente esta es la función del orificio: regular y equilibrar la presión entre ambos cristales, haciendo que la presión, durante el vuelo, se aplique solo en el panel externo, y en caso de que se rompa este último, contener la despresurización. (Los aviones están preparados para que, por debajo de una presión equivalente a 4.500 m, se activan automáticamente las máscaras de oxígeno).

Además, facilita el paso de humedad entre ambos lados del panel intermedio y evita así que la ventana se empañe o se congele, esto último es muy importante pues se deben evitar fisuras, grietas, arañazos y golpes, ya que esta ventana ayuda a mantener la integridad estructural de todo el avión.

LEA MÁS:

Qué países tienen más posibilidades de sobrevivir al cambio climático