Siete semanas de angustia, un poema y la larga agonía de los padres de Madeleine McCann

Los padres de Madeleine McCann, la niña británica desaparecida hace 10 años en Portugal, entraron en una nueva fase de suspenso ante el inminente agotamiento de los fondos oficiales para continuar la investigación y en medio de las dudas sobre si se recibirá mayores financiamientos antes de cerrar el caso.

A solo siete semanas del final de septiembre, fecha en la que terminan los seis meses de ampliación otorgados a mediados de marzo, los padres de la menor se volcaron a Facebook para agradecer el apoyo y mantener viva la esperanza.

"Gracias por continuar estando a nuestro lado y apoyarnos en la búsqueda de Madeleine. Estamos muy agradecidos", escribieron en la página oficial de la campaña para hallarla, luchando a contrarreloj para la aparición su hija.

Scotland Yard todavía no ha dado indicios sobre si volverá a otorgar una prórroga a la Operación Grange, destinada a la búsqueda de la menor, pero no se ha reportado "ninguna pista significativa" en los últimos meses sobre el caso.

Por ello, no queda claro si el Gobierno volverá a aportar otras 85 mil libras (sumando un total de 12 millones) para financiar los costos del grupo de tareas por otros seis meses, entre las críticas del uso de fondos y el clamor de la gente que apoya a la familia.

Los padres acompañaron su publicación con una frase de inspiración que apela al amor y el apoyo: "Ah, la bondad. Qué manera simple de decirle a un alma que sufre que hay amor a encontrar en este mundo".

Según consignó en julio el Daily Mail, este año los oficiales solo volaron en dos oportunidades a Portugal, donde hace diez años desapareció la joven. Las autoridades han afirmado que "no queda ninguna piedra por voltear" en la investigación, pero no dudarán en avanzar ante cualquier nueva línea que abra una teoría plausible.

Maddie desapareció la noche del 3 de mayo de 2007 mientras dormía en su dormitorio en el apartamento que alquiló la familia en la ciudad portuguesa de Praia da Luz durante las vacaciones. Ella se encontraba con sus hermanos, los gemelos Sean y Amelie, mientras sus padres cenaban con siete amigos en un restaurante cercano.

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