Se estrelló un helicóptero de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en Irak: sus siete tripulantes murieron

Todo el personal militar a bordo de un helicóptero -siete en total- de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos murió en la noche del jueves luego de que la nave se precipitara a tierra, según informó el Comando Central norteamericano.

El hecho ocurrió ayer cerca de la noche, cuando el HH-60 Pave Hawk se estrelló en el oeste de Irak y junto a la frontera con Siria. Según el comunicado emitido por el centro de operaciones de la Fuerza Aérea "el accidente no parece ser el resultado de actividad enemiga" y que "está bajo investigación".

"Todo el personal a bordo murió en el accidente. Este accidente nos recuerda los riesgos que nuestros hombres y mujeres corren al enfrentar al enemigo al servicio de nuestras naciones. Hoy pensamos en aquellos seres amados de nuestros miembros en servicio", señaló el brigadier general Jonathan P. Braga, director de operaciones de la coalición.

Otro helicóptero de la Fuerza Aérea que estaba en el lugar vio lo ocurrido y descendió a asistir a los miembros de la aeronave siniestrada. De inmediato, los miembros de seguridad de otras naciones se acercaron al lugar para asegurar la escena en territorio hostil.

"Estamos agradecidos a las Fuerzas de Seguridad de Irak por su inmediata asistencia en respuesta a este trágico incidente. Continúan demostrando su profesionalismo, capacidad y flexibilidad al tiempo que continuamos nuestra lucha para derrotar al Estado Islámico", agregó Braga en su comunicado.

Los nombres de los militares muertos en el terrible accidente todavía no fueron dados a conocer por las autoridades de la Fuerza Aérea norteamericana.

El hecho ocurrió unos 30 kilómetros al sureste de la ciudad de Qaim, donde el Ejército de Estados Unidos mantiene un centro de logística y abastecimiento en apoyo de las operaciones contra el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, en inglés).

De hecho, la ciudad se encuentra junto a la frontera con Siria, una zona que aún se mantiene caliente y donde operan los últimos focos de resistencia del grupo terrorista.

En tanto, el helicóptero accidentado es una versión del famoso Black Hawk, adaptado para realizar evacuaciones médicas en zonas hostiles.

El ISIS fue expulsado el año pasado de los grandes centros urbanos que llegó a controlar en Siria e Irak, pero sus restantes combatientes lograron esconderse en el desierto a ambos lados de la frontera.

A pesar de que en consecuencia la intensidad de las operaciones se ha reducido, las fuerzas iraquíes siguen lanzando cada semana operaciones para tratar de eliminar estos últimos focos de resistencia.

En este contexto, las fuerzas estadounidenses ofrecen vigilancia, inteligencia y apoyo aéreo para los iraquíes y, en el caso de los HH-60 Pave Hawk, asistencia sanitaria rápida y bajo fuego.

MÁS SOBRE ESTE TEMA: