Conmebol perdona a Boca: Con estos ejemplos de (in)Justicia, el fútbol se muere

Marcelo Gallardo se indignó con los fallos del árbitro paraguayo Julio Quintana Rodríguez y lo insultó. Conmebol decidió suspenderlo por dos partidos y agregar una multa en dólares. Y por usar un handy, volvieron a tenerlo en la mira. Nadie defiende que un técnico insulte al referí (le dijo "sinvergüenza", tampoco fue un insulto que no puedan oír los niños), pero resulta que para Conmebol es más grave un moderado exceso verbal que la agresión cobarde y apañada por la indiferencia inicial de un club a los jugadores rivales en medio de un encuentro deportivo. Es más grave un técnico enojado por circunstancias del juego que una agresión con gas pimienta a todo un plantel rival...

En mayo de 2015 se habían mencionado sanciones ejemplares: que Boca no podría jugar la Libertadores de 2016, o tal vez la del año próximo también, que lo sacarían de su estadio y muchas medidas más, a la altura de la agresión que se perpetró contra los rivales en su propio estadio. Sin embargo, la pena fue mucho más leve, y se lo señaló en su momento. Pero siempre las autoridades de Conmebol tienen algo más para sorprendernos: han decidido reducirle la pena a Boca, disputarán apenas dos partidos sin público. De eliminarlos de las futuras competencias, a darle una sanción más leve que la recibida por Marcelo Gallardo, técnico del campeón de América...

La vergonzosa agresión del domingo pasado entre jugadores de Estudiantes y Gimnasia en Mar del Plata parecía un marco adecuado para que los responsables de las sanciones en Conmebol tomaran nota. Y para ser justos, en el amistoso de River-Boca en Mar del Plata las sanciones también fueron escuetas. Sólo para partidos amistosos, una, dos fechas, como para cumplir. Y varios de los expulsados recibieron roja directa. Si les dan una fecha, ¿qué diferencia hay entre recibir roja directa o segunda amarilla? Periodistas y hinchas debatimos con pasión si correspondía roja directa o la segunda amarilla, y para los tribunales de disciplina termina siendo lo mismo...

No importó que hace menos de 48 horas más de 10 jugadores terminen en una trifulca que daría vergüenza a cualquier pandillas de barrio. No importó que los jugadores de River terminen en la guardia haciéndose revisar por la gravedad de las lesiones que sufrieron. Conmebol cumple su centenario y lo celebra... ¡reduciendo las condenas por hechos violentos! Es como si un país celebrar el aniversario de su Patria con una amnistía a los asesinos, por ejemplo.

Hablame de escritorio ahora. Boca fue a hacer lobby y lo consiguió. Nos indigna como hinchas de River, pero no por ser el eterno rival, sino por haber tenidos medio plantel afectado por una agresión cobarde, canalla y apañada. Indigna porque queremos ver 90 minutos de cada partido, nos toque ganar o perder, son las reglas del juego. No será la primera vez que se pierda, por doloroso que fuera.

El hincha que hace poco confesó que lo hizo porque veía que su equipo sería eliminado nuevamente ("Veía que nos íbamos a quedar afuera de nuevo con River, se me salió la cadena y se me ocurrió tirar gas") bien podría ser reincorporado al club como socio, total la sanción no fue tan onerosa. Y si otros hinchas ven que su equipo está por perder, podría imitar al Panadero. Total, todas las sanciones se pueden negociar en el escritorio, por ahí hasta nos sale bien y el partido continúa y les ganamos... Eso es lo que estimula Conmebol con su fallo, porque la reducción de la condena es también una medida en apoyo al violento que tuvo semejante idea como la de tirar gas. Nos indigna como hinchas de fútbol, aquí las camisetas quedan en segundo plano.

Mientra tanto, el fútbol es cada vez menos ese hermoso deporte que todos practicamos casi al tiempo que empezamos a caminar, con la ilusión de ponernos la 10 y convertirnos en el ídolo, el héroe aunque sea por un día. Quién no soñó con hacer un gol en la final, o ganarle el clásico sobre la hora con un golazo impresionante... Pero esos deseos son de otra época, ahora los dirigentes que corrompieron al fútbol no promueven eso: prefieren héroes agredan a sus rivales. Larga vida a YouTube, para que en el futuro las generaciones por venir puedan ver que el fútbol era un juego noble que se podía disfrutar y no una pelea dentro y fuera de la cancha entre inadaptados que solo son condenados en las palabras.