Colombia y las FARC acuerdan las "condiciones necesarias" para la liberación del general Alzate

Los países garantes del proceso de paz de La Habana, Cuba y Noruega, confirmaron que las liberaciones del militar y otros cuatro rehenes en manos de la guerrilla "se llevarán a cabo con la mayor brevedad posible"

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 AFP 163
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Según difundió el diario colombiano El Tiempo, la fórmula para facilitar la liberación de los rehenes fue posible "gracias a una solicitud conjunta que les hicieron tanto el Gobierno como la guerrilla" a los países garantes del proceso de paz.

Cuba y Noruega felicitaron al Gobierno y a las FARC por facilitar esta salida y reiteraron su "firme apoyo a los diálogos de paz y continuarán contribuyendo en todo lo posible para lograr un acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera en Colombia".

De la liberación de los retenidos depende la reanudación del diálogo, interrumpido por el gobierno de Colombia en señal de rechazo a los plagios. "A las FARC les exijo, y no sólo yo: se lo exige nuestra Nación y toda la comunidad internacional, que demuestren su voluntad de paz con acciones y no sólo con palabras". Afirmaba el presidente Juan Manuel Santos.

El Gobierno reclama, en primer lugar, que sea liberado el brigadier general Rubén Darío Alzate, el primero de su rango retenido por los guerrilleros. Con 55 años, 31 de ellos al servicio militar, el mismo Santos le encomendó en enero asumir la nueva y estratégica Fuerza de Tarea Conjunta Titán, diseñada para combatir el terrorismo y las bandas criminales en Chocó y Antioquia, y "alcanzar niveles óptimos de seguridad" en la región.

De la liberación de los retenidos depende la reanudación del diálogo de paz, interrumpido por el gobierno de Colombia en señal de rechazo a los plagios.

Junto con Alzate, fueron secuestrados el domingo pasado la abogada Gloria Urrego y el cabo primero Jorge Rodríguez durante un desplazamiento de civil para la supervisión de un proyecto energético. En un principio, estos fueron los tres plagios que precipitaron la decisión de Santos de suspender el diálogo de paz.

Pero el mandatario, aparte de la liberación de Alzate, Rodríguez y Urrego, también reclamó que las FARC dejen libres a los dos soldados: Paulo César Rivera y Jonathan Andrés Díaz, quienes fueron retenidos en medio de combates hace una semana en una zona rural del municipio de Tame, departamento de Arauca, según la revista Semana.

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Dos años de negociaciones

Las negociaciones de paz del Gobierno colombiano con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) cumplieron hoy dos años en su peor crisis por el secuestro de Alzate. El 19 de noviembre de 2012, las delegaciones del Gobierno y la guerrilla instalaron en La Habana la mesa de diálogos en medio de un ambiente de optimismo en el país.

Los secuestros por parte de los guerrilleros han sido el principal motivo por el que se rompieron los diálogos de paz anteriores. Según recoge el periódico colombiano El Tiempo, así ocurrió en 1992 durante las conversaciones iniciadas por el ex presidente César Gaviria en la ciudad mexicana de Tlaxcala con la mayoría de grupos insurgentes agrupados en la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar.

En ese entonces, el secuestro del ex ministro conservador Argelino Durán Quintero generó una crisis que provocó el fin de aquellas aspiraciones de paz hace 22 años. El ex funcionario murió dos meses después de haber sido plagiado. El acto fue atribuido al frente Libardo Mora Toro del Ejército Popular de Liberación (EPL), cuyos miembros hoy integran algunos frentes de las FARC.

El segundo secuestro que marcó un punto final para un proceso de paz fue hace 12 años, de acuerdo con un artículo de la iniciativa Reconciliación Colombia. Luego de cuatro años de negociaciones en el Caguán, la evidencia de que las FARC habían aprovechado la quietud para fortalecerse militarmente y acrecentar el narcotráfico había hecho tambalear la mesa. El rapto del senador Jorge Eduardo Gechem fue la gota que derramó el vaso.