Guillermo Cóppola con María Laura Santillán: “Para mí, en el último penal Messi le pidió ‘uno más, Diego’”

El histórico representante de Maradona fue testigo privilegiado del mundial de Qatar. ¿Cuáles fueron sus cábalas? El piquito con Chiqui Tapia. El abrazo con Julián Álvarez. ¿Tuvo su merecido homenaje Diego?

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María Laura Santillán Con Guillermo Coppola

Para contar la vida de Guillermo Cóppola se necesitan varias horas porque vivió varias vidas. El legendario manager de Diego Maradona a los 74 años es el encargado de las relaciones públicas en la Copa Argentina en Torneos, es columnista del exitoso programa de Guido Kaczka en la 100 “No está todo dicho” y está a punto de presentar su biopic por Star plus “Coppola, el representante”. Vivió y disfrutó los tres mundiales de fútbol que ganó Argentina. Este último, que festejamos como ningún otro, fue testigo privilegiado en Qatar.

— Yo se lo adjudico más que nada a la tecnología. Porque lo que hemos visto es increíble. Diego decía que el deporte rey es el fútbol. Y no se equivocaba. Nada es igual al Mundial de Fútbol.

— Nunca vimos un festejo de esta dimensión, de esta naturaleza, millones de personas en la calle.

— Lo necesitábamos. Yo creo que necesitábamos una alegría, algo que nos uniera. Ya se percibía ese aire. Ese aire de festejo, de alegría, de felicidad. Y lo del otro día fue increíble. Lástima que no pudieron terminarlo, porque los chicos querían hacerlo.

— Atribuís el éxito del festejo o los millones de personas que salimos a la calle a dos cuestiones: a la tecnología y a la necesidad de tener algo para celebrar. Pero el equipo logró algo que no logró ninguna otra Selección.

— El equipo, fundamental. Vengo del predio de la AFA ahora, donde hubo una presentación de la Copa a los sponsors de la Selección, el agradecimiento a los que acompañaron. Y esto fue de los jugadores, del cuerpo técnico, de los administrativos. María Laura, yo veía al presidente de la AFA el día anterior a cada partido durante una hora y cuarto. Y este hombre se encargaba de las entradas. Di María cuántos son. 27. Dibu. 16. No dependían de la Asociación del Fútbol Argentino, dependían de la FIFA las entradas. Pero cada uno se ocupaba de estos detalles para que los jugadores descansaran, relajaran y jugaran como lo hicieron. Maravillosos 80 minutos contra Francia.

"Yo creo que necesitábamos una alegría, algo que nos uniera", dijo Guillermo Coppola a María Laura Santillán (Crédito: Gustavo Gavotti)
"Yo creo que necesitábamos una alegría, algo que nos uniera", dijo Guillermo Coppola a María Laura Santillán (Crédito: Gustavo Gavotti)

— Los argentinos celebramos cada uno de los partidos.

— Por eso te digo, era una necesidad. ¿Cuánto hace que no festejamos algo? A ver, pensemos, qué festejamos últimamente. Qué se festeja. Todo bife, y bife, y bife. La gente en la calle con reclamos. No ves alegría, felicidad. Un título que cuánto hace que no teníamos. “Messi para igualar a Maradona tiene que ganar un Mundial”, no tiene que ganar un Mundial. Lo ganó. ¿Sabés lo que le dije? ‘¿Sabés lo que tenés que demostrar? Que no tenés que demostrar más nada.’

— ¿Cuándo se lo dijiste?

— Antes del campeonato. No lo vi después. Se lo dije al papá también en una cena dos días antes de la final en Doha. Le dije: ya está, ya está la gloria. En la mesa de los grandes hay cinco jugadores: Cruyff, Di Stéfano, Pelé, Maradona, Messi. Tres argentinos. Listo.

A CHIQUI TAPIA MUCHOS LO SUBESTIMAN. “VIENE DE LA BASURA”. ¿POR QUÉ SOMOS ASÍ?

— ¿Cuánto tiene que ver el éxito del Mundial con la dirigencia de la AFA? Grondona en el 86 y ahora Chiqui Tapia?

— Don Julio fue muy criticado. Puso a la Argentina en el ranking del mundo muchísimos años, primero en el ranking del mundo. Él tenía que ver. Él hizo crecer este fútbol y ganó el campeonato del 86. Importantísimo. Él dejaba jugar. Chiqui, más campechano. Muchos lo subestiman. Cuando se sube a un escenario y habla hay que escucharlo, usa las palabras justas. “El hombre que viene de la basura.” ¿Por qué somos así? “Viene de la basura.” Yo fui cadete de una farmacia y vendía fruta en la calle. ¿Y cuál es? ¿Y por eso soy qué? Nada. Yo respeto. Respeté a Grondona en su momento y en este momento a este presidente.

— Este presidente tuvo que tomar decisiones ¿Tomó buenas decisiones a tu criterio?

— Tomó la decisión de contratar a este técnico. Y muchos decían… ¿Cuál es el currículum de este técnico? No tiene… ¿Qué hay que tener?

"Respeté a Grondona en su momento y en este momento a este presidente", expresó Guillermo Cóppola (Crédito: Gustavo Gavotti)
"Respeté a Grondona en su momento y en este momento a este presidente", expresó Guillermo Cóppola (Crédito: Gustavo Gavotti)

— Diego también dijo que Scaloni no tenía experiencia en su momento.

— Por eso. Por ahí le faltaba. Fueron opiniones. Yo tampoco castigo a los que dijeron que no. No hay que crucificarlo porque era una opinión.

— Le pegaron mucho a Scaloni.

— Total. ¿Sabés lo que hizo? Creó un grupo indestructible. Con sus cosas, rockeros, rockstars. Tini en el medio con De Paul, Antonella. Yo comparaba a Antonella en el inicio de Claudia y Diego. Porque Diego era familiero. Era otro estilo, pero era familiero. Te lo juro por Dalma y Gianinna decía. Sus hijas, el colegio, ir a buscarlas. Después lo invadió algo que él no esperaba y Dios quiera que nunca le pase. Yo nunca escupo para arriba con eso.

— Podrían representar dos argentinidades distintas Maradona y Messi? Maradona creativo pero transgresor y Messi creativo con gran voluntad de superación?

— Un dios rebelde, contestatario. Que te agarra una bandera y te agarra la otra. Porque Diego era ése. Diego tenía la bandera de Maduro y nos juntábamos con Fidel Castro. Y venía acá y se abrazaba con Alfonsín, estaba emocionado el día que se abrazó con Alfonsin. Y después era Menem. Él es ese, él no se escondió. Messi es más tranquilo. ¿Vos viste qué ubicado? ¿Vos lo viste abrazado con alguien?

— No quiso foto con ninguno.

— Con ninguno. Estilos. Pero, ¿castigamos a Diego o criticamos a Messi? No, estilos. Ahora soy maradoniano y messista.

María Laura Santillán entrevistó a Guillermo Cóppola, quien vivió y disfrutó de los tres mundiales de fútbol que ganó la Argentina (Crédito: Gustavo Gavotti)
María Laura Santillán entrevistó a Guillermo Cóppola, quien vivió y disfrutó de los tres mundiales de fútbol que ganó la Argentina (Crédito: Gustavo Gavotti)

— ¿Qué destacas de Messi?

— Su gran concentración en el trabajo. Diego lo hizo seis meses. Ocho si querés, así, a rajatabla. El 3 de enero del 86 viene a mi oficina en Nápoles y me dice Guille: quiero que me ayudes, quiero que me acompañes a ser el mejor del mundo. Él ya venía con esos temitas que conocemos. Se puso pila, garra, gimnasio en su casa, en la cochera, en la oficina donde yo estaba. El del Campo Paradiso en Soccavo. Se preparó a lo grande. Messi vive preparándose. Cuando tenía sus problemas del estómago, que lo cargábamos, ‘vomitero’, cambió la alimentación. Un tipo profesional, perdoname la expresión, profesional del carajo.

LIO SIEMPRE FUE LÍDER, NO LO MOSTRABA

— ¿Y como líderes cuales son las diferencias entre ellos?

— Que Diego lo mostraba más y que Lio lo era y no lo mostraba. ¿Cantaba el himno? No cantaba el himno. Son estilos. Lio siempre fue líder, no lo mostraba. Hasta que un día salió de la caja, como dice mi amigo Guido Kaczka y empezó a cantar el himno. “Salí bobo” ¿entendés? “Qué mirás bobo”. Nos gusta porque somos así también.

— ¿Y vos, lo criticabas?

— No. No porque ya veía lo que era.

— La Selección tiene un equipo único. A qué atribuís esto que se armó tan poderoso ¿Es responsabilidad de Messi? ¿Es responsabilidad del técnico?

— Sí, del técnico y de Messi. De los dos, sí. Yo viajo con ellos a algunos partidos de Selección amistosos y me doy cuenta. Me doy cuenta. Dónde se sientan, cómo se ubican. El joven está con el grande. Se ocupan de esas cosas. Otros no lo hacen.

" No sabés lo que era en Doha esperar los días. Y eso que tenías shoppings con canoas, Venecia, fuentes de agua con canciones, ponían tango, ponían canciones de todos los países. Lugares lujosísimos. No se me pasaba nunca el tiempo, yo quería que jueguen", revela Cóppola (Crédito: Gustavo Gavotti)
" No sabés lo que era en Doha esperar los días. Y eso que tenías shoppings con canoas, Venecia, fuentes de agua con canciones, ponían tango, ponían canciones de todos los países. Lugares lujosísimos. No se me pasaba nunca el tiempo, yo quería que jueguen", revela Cóppola (Crédito: Gustavo Gavotti)

LÍO ES UN ARTISTA, COMO LO FUE DIEGO. DESPUÉS HAY FUTBOLISTAS QUE ACOMPAÑAN AL ARTISTA.

— Ellos además juegan. Muestran fútbol todo el tiempo.

— Me encanta que digas eso. Los 80 minutos de Francia, 78, fueron maravillosos María Laura. Era arte. Porque Lio es un artista. Como lo fue Diego. Como lo fue Kempes. Como lo fueron tantos grandes. Estos son artistas. Después hay futbolistas que acompañan al artista. El juego es de equipo. Ni Diego sólo ganó el torneo del 86. Hizo el mejor gol, la mano de Dios.

— ¿Qué crees que vemos en ellos que nos gusta? Algo más nos muestran, algo que trasciende.

— María Laura, ¿vos esperabas el partido siguiente? ¿Cuándo se ganaba uno esperabas el otro? ¿Lo habías hecho anteriormente? No sabés lo que era en Doha esperar los días. Y eso que tenías shoppings con canoas, Venecia, fuentes de agua con canciones, ponían tango, ponían canciones de todos los países. Lugares lujosísimos. No se me pasaba nunca el tiempo, yo quería que jueguen. Que sigan, yo quería el partido, quería que pasen los días. Se me hizo muy largo por la ansiedad de querer. Y los jugadores, el cuerpo técnico y los dirigentes tenían una fe increíble.

AGÜERO, CRESPO, ZANETTI, CAMBIASSO, SORÍN, BATISTUTA, LO QUE GOZABAN, LO QUE GRITABAN. ERA UNÁNIME.

— No recuerdo haberme encariñado tanto con un equipo de la Selección. Con todos, no con uno o dos jugadores. No como en el 86 con Maradona y dos o tres más, Claudio Paul, Ruggeri, Goyco.

— Sí, los querés. Porque ves la humildad. ¿Sabés lo que vi también que me encantó? Yo estaba en un skybox, un palquito. Estaba con Agüero, el hijo y su pareja y dos amigos. Éramos seis en un skybox para diecinueve. Mesa, bebidas, comida. Lujo terrible. Sale Hernán Crespo. Guille, ¿puedo acercarme al palco de ustedes? ¿Cuántos son ustedes? Eran veinte. No importa, vinieron todos. Zanetti, Cambiasso, Sorín, Crespo, Batistuta. Lo que gozaban. Lo que gritaban. Lo que alentaban estos chicos, Argentina, Argentina. Era unánime. Porque vos podés decir: un poquito de celos el jugador tiene porque el otro gana. Yo los vi tan liberados. El Kun, qué bien que estuvo.

— Estábamos todos contentos.

— Por ahí me tatúo. Dije: nunca me voy a tatuar. Tres estrellitas. Mi señora me dice.

María Laura Santillán con Guillermo Coppola

— Escuché que tu cábala tenía que ver con horarios y desplazamientos.

— Ocho menos diez del día anterior al partido.

— ¿A dónde ibas, a la concentración?

— Sí.

— Ocho menos diez en punto.

— A la Universidad.

— Y hasta qué hora te quedabas?

— Nueve menos cinco. Una hora y cuarto, una hora y diez. Ahí me cruzaba con De Paul, Di María. El Dibu. Julián Álvarez me ve: ¡Guillote! Claro, un chiquito, granitos, son chicos chiquitos. “No lo puedo creer”, dice. Nos damos un abrazo. “Foto” no, le digo yo.

— Sin foto.

— ¿Cómo foto no? “No me saqué una foto hasta ahora”. Al día siguiente hizo dos goles y el penal que le hicieron. Te podés imaginar el partido siguiente. Estaba esperando en la puerta que yo llegara….

— Julián Álvarez para darte el abrazo.

— Claro, el abrazo.

— Lo sumamos a la cábala del horario.

— A la cábala del horario lo que había pasado en el partido.

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Guillermo Cóppola le contó a María Laura cómo eran sus cábalas en Qatar (Crédito: Gustavo Gavotti)
Guillermo Cóppola le contó a María Laura cómo eran sus cábalas en Qatar (Crédito: Gustavo Gavotti)

— El abrazo con Julián Álvarez sin foto hasta que terminara el campeonato. Y a la hora exacta que tenías que salir te ibas, aunque te quisieras quedar.

— A las nueve se iban a comer y el que llegaba tarde, multa. Vos los veías corriendo por esos pasillos de la Universidad para llegar.

— No había ningún contacto especial además del abrazo con Julián Álvarez?

— Con Chiqui, que algo se sacaba…Algo se sacaba de lo que tenía puesto y me lo daba. Una remera, un short.

HOY NOS DIMOS UN BESO CON TAPIA. NOS HABÍAMOS PROMETIDO UN BESO Y LO CUMPLIMOS.

— ¿”En el momento en que veo a Coppola me saco el short y se lo doy”?

— Y se lo doy. “Llevate”, decía, y me llevaba. Y hoy nos dimos un beso. Nos habíamos prometido un beso y lo vi hoy hace un rato.

— ¿Era parte de la promesa de ganar el Mundial darse un beso con Tapia?

— Darme un beso con Tapia. Fue cortito igual, rapidito.

— ¿Un piquito?

— Un pico, sí. Y lo cumplimos. Hombres grandes. Al partido con Arabia no fui y perdimos. Entonces eso se te mete en la cabeza. Tenía mucha confianza en este grupo. 19:50 a 20:55 en la Universidad. Perfecto. Y ahí al que te cruzabas, te cruzabas.

— Le devolviste la ropa a Tapia?

— No, es para los amigos.

María Laura Santillán con Guillermo Coppola

— Último minuto, Montiel iba a patear el penal y Messi miró para arriba, miró al cielo. Le pidió ayuda a Dios ¿no?

— ¿Yo sabés qué interpreté? Hay gente que lee labios. ¿Vos sabías que hay gente que lee los labios? Dicen que le pidió a Diego. Para mí le pidió, no sé a quién le pidió. No lo vi después para preguntarle. Ya lo voy a ver. Sí, él hace, se encomienda a algo. Una más o uno más dice. Pero no dice Diego. No sé si dice.

— ¿Vos crees que le pidió a Diego?

— Yo sentí que le pedía a Diego, qué querés que te diga. No es que yo digo ‘lo leí, vi y escuché’. No, no. El día que lo vea le voy a preguntar a quién. ¿Pero sabés cuál es el homenaje? La canción, doña Tota, don Diego, y Diego. Me emociona, porque lo hacían ellos. Basta de grieta: mejor Maradona que Messi, mejor Messi que Maradona. Los dos grandes, que suerte.

ALGUNO DIJO QUE DIEGO NO TUVO HOMENAJE, LA CANCIÓN ES EL MEJOR HOMENAJE.

— Lo fuerte, lo más fuerte fue que el país entero eligió cantar “Muchachos” y ellos eligen cantar “Muchachos” varias veces después que ganan hermanados y le cantan a Diego y yo me imaginaba que vos llorabas.

— Pero total, como lloraría ahora porque lo hacían naturalmente. Les salía espontáneamente. Y no pensaban que Diego por ahí criticó a Scaloni, y podía existir un celo porque Diego era muy celoso, era muy celoso, pero esa canción es el homenaje. Viste, alguno dice que no, que Diego no tuvo el homenaje que tendría que haber… Diego tuvo el mayor homenaje, esa canción que la escuchábamos cada rato del público, de los jugadores, de la gente grande, de los chiquitos. Don Diego y doña Tota. El mejor homenaje para mí. Otro por ahí dice no, puede ser una hija, Gianinna sentía que por ahí no tuvo… Y a lo mejor Gianinna tiene razón, pero yo siento que estuvo recontra reconocido.

María Laura Santillán con Guillermo Coppola

— Se ve grandeza de los jugadores de esta generación, agradecimiento y generosidad.

— Por eso, ¿entonces Messi se encomendó a Diego? A lo mejor no. Yo siento que sí. Le dijo “una más Diego”.

— ¿Messi va a estar en el Mundial que viene? ¿Cuáles son sus próximos pasos? Ya pasó por lo más grande.

— Basta. Ganó todo. María Laura, ganó todo. Diego no ganó tanto, no jugó tanto tampoco, pero este chico rompió todos los récords. Pero a mí a Diego no me lo toques. Diego es lo máximo.

—- ¿Si?

— Pero bueno, Messi …

— ¿Por qué para vos sigue siendo Diego lo máximo?

— Sufría mucho. Yo lo conocí sufriendo. No es que quiera limpiar absolutamente nada. Hay muchos que la historia no la conocen. Yo empiezo con Diego en el 85 y él empieza con ese problema en el 83.

— ¿Por la adicción vos creés que Diego es el más grande?

— Los seis meses que se preparó hizo un gol increíble, jugó un Mundial terrible, le ganamos a Alemania un partido que se podría comparar con el de Francia, pero no llegamos al alargue. Ese gol inolvidable contra los ingleses. La picardía de la mano. Un Diego grandioso. Pero tenía eso.

"A mí me gustaría que Messi le regale seis meses a Newell´s. En Santa Fe los jugadores nacen de abajo de la tierra. Y se lo merece Newell´s. Porque ahí nació", manifiesta Cóppola. (Crédito: Gustavo Gavotti)
"A mí me gustaría que Messi le regale seis meses a Newell´s. En Santa Fe los jugadores nacen de abajo de la tierra. Y se lo merece Newell´s. Porque ahí nació", manifiesta Cóppola. (Crédito: Gustavo Gavotti)

— ¿A dónde te gustaría ver jugar a Messi?

— A mí me gustaría que le regale seis meses a Newell´s. En Santa Fe los jugadores nacen de abajo de la tierra. Y se lo merece Newell´s. Porque ahí nació.

— ¿Cuál de los equipos que viste este último Mundial te decepcionó más?

— España, Alemania, Inglaterra. El título volvió a Sudamérica. No sé si los brasileros estarán muy contentos, pero para el fútbol de Sudamérica este título es brillante.

— Messi tiene mucha afinidad y amistad con futbolistas muy importantes. Con Neymar. Con Suárez. Con Alves.

— Con Mbappé.

— ¿No hay una distancia con Mbappé?

— No, creo que se saludaron bien. No son amigos. Con Neymar es amigo. Con Suárez es amigo. Fueron muchos años juntos. Cuántos títulos. Cuántos festejos. Sufrimientos. Algunas derrotas también que te acercan y te unen.

QUE MBAPPÉ ANTES DE HABLAR DE SUDAMÉRICA VEA LOS 80 MINUTOS DE FRANCIA- ARGENTINA.

— ¿No es Mbappé el que pone distancia?

— ¿Mbappé? Mbappé tiene que crecer. Y tiene un futuro maravilloso. Pero antes de hablar de América, de Sudamérica, que ponga la televisión, que se ponga el partido y que vea los 80 minutos de Francia-Argentina. Y que después opine como opinó, los sudamericanos no están a la altura porque…

— Les parece que habría que jugar la final de nuevo.

— Sí, claro. Será en el próximo Mundial. Que esperen. Basta.

— Acá muchos argentinos firmamos un pedido para que dejen de llorar los franceses.

— Sí total. No me llegó. Más bien que lo voy a firmar. Basta, ya está. Bastante que empataron, genialidad de él, hay que decirlo. No creo haber visto en tantos años un partido como ese. Era un Mundial que no se podía perder.

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