Con la llegada del frío, las bebidas calientes se convierten en protagonistas de las mañanas y las noches en los hogares mexicanos. Entre las opciones menos comunes, pero igual de deliciosas, se encuentra el atole de ciruela, una variante frutal del tradicional atole que combina el sabor dulce y ligeramente ácido de esta fruta con la textura espesa y reconfortante del maíz.
Además de su sabor, la ciruela aporta beneficios nutricionales, ya que es rica en fibra, antioxidantes y vitaminas como la A y la C, que contribuyen a la digestión y al fortalecimiento del sistema inmunológico. Consumida en forma de atole, resulta una bebida ideal para aportar energía y calor durante los días fríos.
Receta tradicional de atole de ciruela
Ingredientes:
- 500 gramos de ciruela fresca (roja o amarilla), sin hueso
- 1 litro de agua
- 1 taza de leche (opcional, puede ser vegetal)
- ½ taza de azúcar, piloncillo rallado o al gusto
- 3 cucharadas de fécula de maíz (maicena) o masa de maíz disuelta
- 1 raja de canela
- 1 pizca de sal
Preparación paso a paso
- Cuece las ciruelas: Lava bien las ciruelas, retira el hueso y colócalas en una olla con medio litro de agua y la raja de canela. Cocina a fuego medio durante 10 a 15 minutos, hasta que la fruta esté suave.
- Licúa la fruta: Retira la canela y licúa las ciruelas con el líquido de cocción hasta obtener una mezcla homogénea. Si deseas una textura más fina, puedes colar la preparación.
- Disuelve la fécula: En un recipiente aparte, disuelve la fécula de maíz en el resto del agua fría o en la leche, asegurándote de que no queden grumos.
- Cocina el atole: Vierte la mezcla de ciruela en la olla, añade el endulzante y la pizca de sal. Incorpora poco a poco la fécula disuelta, sin dejar de mover, y cocina a fuego medio-bajo.
- Espesa y sirve: Continúa moviendo constantemente durante 10 minutos, hasta que el atole espese y tome una consistencia cremosa. Ajusta el dulzor si es necesario.
Puedes añadir un toque de vainilla, sustituir el azúcar por miel o piloncillo, o incluso incorporar un poco de anís estrella para darle un aroma diferente. Para una versión más ligera, prepara el atole solo con agua; si lo prefieres más cremoso, utiliza leche.
El atole de ciruela es una opción deliciosa, nutritiva y fácil de preparar, perfecta para acompañar el desayuno o disfrutar por la noche. Su sabor casero y tradicional lo convierte en una excelente alternativa para reconfortar el cuerpo durante la temporada invernal.