El coordinador Rubén Moreira Valdez reveló que la reforma al Poder Judicial no plantea cómo sería la votación de los mexicanos en el extranjero para seleccionar a los juzgadores federales y locales.
En su programa “Con Peras, Manzanas y Naranjas”, el líder congresista criticó que este cambio a la Constitución no contemple de forma expresa la participación efectiva de los mexicanos que viven en el extranjero para que seleccionen a los juzgadores federales y locales.
“Seguro tratarán de justificarse con otros artículos constitucionales o futuras leyes secundarias; sin embargo, fue un descuido y con ello se hace patente la deficiencia del texto. Incluso, uno de los transitorios prohíbe todas las interpretaciones, por lo que debe tomarse de manera literal y eso crea confusión, pues al no establecerse el derecho expresamente ni señalar como se ejerce parece que se cancela el mismo”, manifestó en su programa.
Por otro lado, el legislador priista agregó que el mexicano en el extranjero tendría el derecho a participar en la selección de juzgadores para su entidad de procedencia.
Expuso que hay problemas muy prácticos; por ejemplo, dijo, un jalisciense en Chicago tendría que recibir boletas para seleccionar juzgadores federales y de su entidad, y si en la misma fila está un coahuilense sería lo mismo. Todas estas incógnitas y complicaciones, advirtió, son producto de una reforma improvisada y regresiva.
Reforma no es justa ni democrática, alertó el priista
Recordó que la reforma no es ni justa ni democrática ni popular, engaña a la gente con una narrativa falsa e improvisada, que no dice nada del voto de los mexicanos en el extranjero. Seguro, recalcó el exgobernador de Coahuila, van a salir con alguna respuesta frívola, pero lo cierto es que no se discutió el voto en el extranjero ni se explicó cómo se va a operar.
Enfatizó que la reforma tiene grandes defectos en su redacción y es de tal calibre su improvisación, que nadie del oficialismo ha resuelto cómo se votará, si nos atenemos a lo que dice lo aprobado. Por ejemplo, un ciudadano que vote en la Ciudad de México recibirá 25 boletas, deberá escribir hasta 450 nombres y depositar su voto en 25 urnas, una verdadera locura.
“La idea de llevar a la constitución temas muy específicos, como el diseño de las boletas, dejaron a nuestra carta magna como un recetario, pero lo más preocupante es que se impide que en las normas secundarias se arreglen los problemas, porque se corre el riesgo de que sean inconstitucionales”, destacó Moreira Valdez.
Finalmente, subrayó que hay acciones legales que los partidos políticos y ciudadanos pueden utilizar para impugnar la reforma, como lo es la acción de inconstitucionalidad, los primeros, y los amparos los segundos.