Una multitud de devotos espera dentro y fuera de la ermita para procesión de la Virgen

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El Rocío (Huelva), 19 may (EFE).- Una multitud de devotos se congrega ya dentro y fuera de su Santuario a la espera de vivir el que es el momento culmen de la romería del Rocío, la salida en procesión de la Virgen del Rocío, también conocida como la 'Blanca Paloma', a hombro de los almonteños, por las calles de su aldea.

Desde antes de medianoche la gente se ha ido acercando al que es el punto neurálgico del Rocío por el que están pasando los simpecados de las distintas hermandades filiales en el rezo del Santo Rosario.

Si son muchas las personas que se concentran fuera de la ermita, no son menos las que esperan dentro de ella, completamente abarrotada, salvo su nave central, que queda vacía al objeto de facilitar la entrada del Simpecado de la Hermandad Matriz de Almonte a su regreso tras el rezo de ese Santo Rosario.

Y en la escalinata de acceso al altar, sentados junto a la reja, los almonteños cobijan a la Blanca Paloma a la espera de que se produzca el 'salto de la reja', momento en el que se harán con las andas de la Virgen y la sacarán en procesión.

Es en ese instante, que no tiene hora fija -el año pasado fue minutos antes de las 3:00 horas- cuando, tradicionalmente, tiene lugar el salto, aunque se desconoce si este año será así o no.

Hasta que eso ocurra, en el exterior del Santuario, desde donde se puede ver a la imagen entronizada en su paso, con el histórico ajuar conocido como "de los Montpensier", la gente espera con calma; y también, por el momento, dentro del templo.

La afluencia de personas continuará aumentando conforme vayan pasando los minutos; a todos ellos les mueve un mismo fin, ser testigos de excepción de los primeros momentos de la procesión.

En los aledaños del Santuario permanece activo el dispositivo específico para dar seguridad a los ciudadanos ante la concentración de personas en el momento de la salida de la Virgen. EFE

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lra/amd

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